El próximo domingo 27 de marzo –fecha única de registros de precandidatos-, se prevé que en el PRI del Estado de México se concrete la candidatura de unidad a la gubernatura de la entidad, con lo cual en automático se conocería el nombre del abanderado del tricolor que pretenda suceder a Enrique Peña Nieto.

Cinco son los nombres que con mayor frecuencia se han manejado en los últimos ochos meses, y de cuya baraja se prevé salga el ungido para competir por la gubernatura mexiquense en los comicios del próximo 3 de julio. Aunque el proceso de selección está determinado a una convención de delegados a celebrarse el 7 de abril entrante; será el domingo 27 de marzo cuando ocurra el registro del precandidato que será elegido y legitimado en la fecha antes señalada por la militancia partidista. Alfredo del Mazo Maza, Ernesto Nemer Álvarez, Eruviel Ávila Villegas, Luis Videgaray Caso y Ricardo Aguilar Castillo son los personajes que parecen disputarse la nominación, cuya decisión será determinada por el mandatario Enrique Peña, y comunicada a los delegados del PRI para que respalden dicha medida. Alfredo del Mazo, hijo del ex gobernador Alfredo del Mazo González. Con una carrera política vertiginosa, tuvo cargos menores en Petróleos Mexicanos. Y distintas actividades de asesoría financiera en la banca comercial, fue hasta el mandato de Enrique Peña Nieto que saltó a la primera línea de la clase política mexiquense. En 2005, inaugurado el gobierno peñista, se incorporó como director general de la Atención a Micro, Pequeña y Mediana Empresa, que se transformó en 2006 en Instituto Mexiquense del Emprendedor. En 2008 tomó protesta como secretario de Turismo del Estado de México. Para 2009 presentó su renuncia y contendió por la alcaldía de Huixquilucan, cargo que actualmente desempeña. Con 35 años de edad, y el respaldo político de su padre, pretende ser el tercero de la dinastía Del Mazo en convertirse en mandatario de la entidad. Ernesto Nemer Álvarez, con la mayor trayectoria política, inicia su carrera desde el mandato de Emilio Chuayffet, de quien fue su secretario particular. Laboró también para la estructura gubernamental en las administraciones de César Camacho Quiroz, Arturo Montiel Rojas y Enrique Peña Nieto. Cercano a la clase política y empresarial libanesa vigente en el territorio estatal. Marcado por la derrota electoral del año 2000, donde perdió la alcaldía de Metepec, frente al panista Marcos Álvarez Malo, Nemer resurgió en el escenario político como subsecretario general de gobierno y secretario de Administración durante el sexenio de Arturo Montiel. Casado con Carolina Monroy del Mazo, sobrina de Alfredo del Mazo González; Ernesto Nemer fue designado secretario de Desarrollo Social al inicio de la gestión de Peña Nieto. Renunció a su encargo en 2009, para contender por una diputación local en Metepec, la cual ganó y por designación de los legisladores priístas se convirtió en coordinador del Grupo Parlamentario y posteriormente Presidente de la Junta de Coordinación Política de la Legislatura local. Eruviel Ávila Villegas, actualmente es alcalde de Ecatepec, cargo que ocupa por segunda ocasión. Con una trayectoria que se centra en su municipio, de donde también fue secretario del Ayuntamiento. Durante 1997, con César Camacho como mandatario mexiquense se convirtió en diputado local. En el arranque del gobierno montielista se desempeñó como subsecretario de gobierno. En el año 2000, el PAN arrebató Ecatepec a la hegemonía priísta. Fue en 2003, cuando el tricolor recuperó ese bastión electoral con la candidatura de Eruviel Ávila. Sin embargo, tres años después, el propio Ávila Villegas entregó el poder al perredista José Luis Gutiérrez Cureño. En 2006, ya con Peña Nieto como Gobernador; Eruviel Ávila fue electo diputado local, por un periodo corto fue presidente del PRI mexiquense. Se convirtió en coordinador del Grupo Parlamentario del PRI. Y en 2009, retornó a la contienda electoral por Ecatepec, que recuperó para la causa priísta en el municipio más poblado del país. Luis Videgaray Caso, ajeno a la política partidista. Inicia su trayectoria profesional como asesor del secretario de Hacienda y Crédito Público, Pedro Aspe Armella, durante el gobierno de Carlos Salinas de Gortari. Identificado con la clase tecnócrata impulsora del neoliberalismo en el país, su carrera está marcada por la asesoría financiera a distintos gobiernos estatal. Bajo esa actividad, Videgaray Caso y su empresa Protego, arribaron al Estado de México. Fueron responsables de un refinanciamiento de la deuda pública del Gobierno del Estado de México, durante el sexenio de Arturo Montiel Rojas, cuando los secretarios de administración eran Enrique Peña Nieto y Luis Miranda Nava. En la asunción al poder de Peña Nieto; Luis Videgaray fue designado secretario de Finanzas. Presentó su renuncia al cargo en 2009, para surgir como candidato de lista plurinominal a una diputación federal. Actualmente es legislador federal, sin haber competido electoralmente en las urnas, y es presidente de la comisión de Presupuesto y Cuenta Pública en San Lázaro. Ricardo Aguilar Castillo, es un militante nato del PRI. Fue secretario del Ayuntamiento de Jilotepec. Posteriormente se convirtió en presidente municipal de Jilotepec. Y para 2003 fue electo diputado local, donde compartió curul con el actual Gobernador Enrique Peña Nieto, en la Legislatura Estatal. Allí, consolidó una amistad que actualmente lo tiene en ascenso de su carrera política. Con el inicio de la gestión de Peña Nieto; Ricardo Aguilar Castillo fue designado como secretario del Trabajo en la entidad en septiembre de 2005. Un año después, renunció a su encargo en el gabinete de Peña Nieto, y fue designado presidente del PRI en el Estado de México. Fue responsable de los comicios de 2009, donde el PRI apabulló electoralmente a nivel nacional, con factores relacionados con una crisis económica internacional sin precedentes, y una epidemia inédita relacionada con la Influenza AH1N1. El PRI del Estado de México, sobredimensionó las victorias, y se atribuyó la recuperación de bastiones electorales del PAN como Naucalpan, Tlalnepantla, Atizapán de Zaragoza y Cuautitlán Izcalli; y del PRD como Nezahualcóyotl, Texcoco, Chalco y Valle de Chalco. En 2010, pese a la obligación estatutaria de renovar la dirigencia estatal del tricolor, se le designó como delegado especial del CEN con funciones de Presidente al frente del PRI mexiquense. En medio de diversas especulaciones sobre quién será el ungido para convertirse en candidato a la gubernatura, el escenario se disipará a más tardar el próximo domingo, cuando sea la fecha de registro de lo que se anticipa como una candidatura única dentro del PRI del Estado de México. Fuentes cercanas al priísmo estatal han dado a conocer que los cinco aspirantes llegarán juntos a la sede del PRI mexiquense para respaldar la candidatura de unidad. Aún cuando se ha especulado el registro de un precandidato ajeno a esos cinco nombres, el respaldo de los sectores no se otorgará a nadie que no sea el elegido por el mandatario Enrique Peña. Desde hace una semana, la dirigencia del PRI estatal ha citado a los consejeros políticos para firmar su respaldo al candidato de unidad, cuya firma se estampa en hojas en blanco, y sólo falta agregar el nombre del abanderado del tricolor.