Toluca, Edomex. 26 de enero de 2017.- Ninguno de los aspirantes a la gubernatura solicitó licencia a la Comisión Permanente del Congreso de la Unión. Los legisladores federales, Alfredo del Mazo Maza, Carlos Iriarte Mercado y Carolina Monroy del Mazo dejaron pasar la sesión de ayer miércoles, –la última previo al inicio del periodo ordinario de sesiones–, lo que podría suponer que han quedado fuera de competencia por la candidatura priísta. Mañana viernes, cuando se realice el pre registro de candidatos se contempla que los aspirantes entreguen documento de solicitud de licencia a cargos de elección popular.
Aunque el tiempo se les ha agotado, y para muchos la decisión no está tomada, hay quien busca salidas. El equipo delmacista, advierte que podría llegar al registro únicamente con la solicitud de licencia ingresada a la oficialía de partes, pero sin que haya sido aprobada por el pleno cameral. El trámite está permitido, no obstante, se consideraría incorrecto por lo ocurrido en anteriores procesos internos priístas. La experiencia dicta que los precandidatos entreguen la licencia aprobada por las legislaturas o cabildos, según corresponda cada caso.
A 24 horas de que el PRI mexiquense oficialice el registro de precandidatos, todo apunta a que no hay nada para nadie. La decisión no está tomada, y esa supondría la razón para que todo siga como empezó. Peña Nieto se encuentra entrampado en una aguda situación personal para decidir sobre el futuro político de su tierra natal. Enrique ya se reunió con los finalistas, y en el transcurrir de las horas se conocerá públicamente al ungido. Entrada la noche del jueves.
De confirmarse, eventualmente, el descarte de facto de Alfredo, Carlos y Carolina, ahora la mirada se vuelve sobre integrantes del gabinete eruvielista y peñista. A la final se apuntarían Ana Lilia Herrera y José Manzur, jugando en el equipo de Eruviel; mientras en la acera de enfrente, Alfonso Navarrete, Ernesto Nemer y Ricardo Aguilar se encuentran a la expectativa. Esos cinco aspirantes, basta con presentar una renuncia a la medianoche para registrarse el viernes próximo. Mantienen viva su aspiración.
Algunas voces insisten en la necesidad de empujar más de un registro. La razón, es que la convocatoria imposibilitaría realizar una precampaña en caso de tener un precandidato único. Lo cierto es que para el priísmo mexiquense representa un riesgo muy alto encaminarse a un proceso interno, donde se advierte una fractura o un colapso. Hasta ahora, hay ya equipos confrontados que en una contienda partidista podrían derivar en división. No hay condiciones para que el PRI comience a experimentar, en la víspera de la campaña electoral.
Hoy es el Día D para los priístas. Aunque no haya un anuncio oficial, se lanzarán las señales suficientes para conocer si alguien solicitó licencia de última hora o simplemente renunció. Sea quien sea, las huestes priístas ya están convocadas para el próximo viernes abarrotar la sede del PRI y mostrar disciplina. Un riesgo de división, junto al hartazgo social, la desaprobación de los gobiernos priístas y las campañas que ya han arrancado otros partidos, serían los elementos suficientes para pensar que el PRI pueda perder tras casi 80 años en el poder.
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Ayer, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación ando muy activo resolviendo quejas sobre el proceso electoral de gobernador del estado de México. En principio, la Sala Superior dio la razón al PAN respecto a los espectaculares que colocó el petista Oscar González Yáñez, a lo largo y ancho de la entidad, para promover su imagen, desde hace seis meses. Los magistrados ordenaron el retiro de los anuncios al considerar que son promoción personalizada y sancionaron al petista, aunque aun no se revela cual será su castigo.
También los magistrados desecharon las quejas que promovió el PRD por las famosas Ferias Integrales de Servicios, donde los gobierno federal y estatal entregaron miles de monederos electrónicos y despensas a los asistentes a estos eventos.
También fueron reencausadas las impugnaciones que promovieron los aspirantes candidatos independientes, Teresa Castell y Guillermo Ortiz Solalinde, al reglamento que regula sus actividades. Ambos se quejan de que son anticonstitucionales las 328 mil firmas que se les exigen para poder obtener el registro como candidatos independientes. Ahora será el Tribunal Electoral del Estado de México, quien resuelva estos juicios de inconformidad.
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