Redacción
Toluca, Edomex 25 de enero del 2018.- Pinfra, empresa concesionaria de la autopista México –Toluca aumentó este jueves el peaje de esta vialidad por donde circulan más de 250 mil autos diariamente. En el tramo Santa Fe- La Marquesa, la cuota pasó de 76 a 82 pesos, mientras que en el tramo La Marquesa- Lerma, pasó de 47 a 53 pesos.
Utilizar esta vialidad, como lo hacen a diario decenas de miles de mexiquenses costará 135 pesos , pero hacerlo de ida y vuelta representará un desembolso de 270 pesos.
Esta vialidad ha sido la mina de oro de Pinfra, propiedad de David Peñaloza, quien ha acumulado miles de millones de pesos por la operación de esta autopista.
Apenas, en 2014, el gobierno federal le otorgó a Pinfra una prórroga de 30 años más en el título de concesión de esta autopista, a cambio de que construyera el tramo de cuota La Marquesa Lerma, como estaba proyectado en un inicio.
Desde 1989, David Peñaloza –a través de Tribasa– obtuvo la concesión para construir, operar y administrar la México-Toluca. En un inicio solo construyó un tramo de 21 kilómetros de cuota, que van de Santa Fe hasta La Marquesa.
A principios de la década de los noventa, Tribasa desapareció y dio paso a Pinfra, quien mantuvo la administración y operación de esta autopista, que durante
años fue la autopista más cara del país.
En 2006 y tras largas negociaciones del gobierno mexiquense con la Federación y los concesionarios, se logró pactar una disminución en el peaje del 40 por ciento, con la condición de que la concesión que vencía en 2013, se prorrogara hasta 2030. Gracias al pacto, en aquel año, el peaje paso de 80 a 50 pesos.
En poco más de una década, Pinfra volvió a subir la cuota hasta 82 pesos, con autorización de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.
La concesionaria justifica que el incremento está indexado al índice inflacionario del país.
El aumento generó molestia de los usuarios, quienes protestaron en redes sociales y han hecho llamados para no ocuparla más.
Además de quejan de que el servicio de esta vialidad es de mala calidad, pues ya lleva más de dos años en obras y en muchos tramos de la autopista, se presenta reducción de carriles, ahora por la obra del Tren Surburbano.
Los usuarios aseguran que el incremento no se justifica pues en este momento no existen los estándares de calidad de una autopista, por las obras que se realizan en ella y la circulación de unidades pesadas que hacen peligrosa la circulación por la autopista.
Las autoridades federales no han emitido comentario alguno sobre el incremento.
Pinfra tiene la concesión para seguir operando y administrando esta vialidad en sus dos tramos de cuota hasta el 2049 y David Peñaloza seguirá llenándose los bolsillos.