Redacción
La violencia no cesa en el Estado de México. Ayer fueron hallados un par de cadáveres en la zona oriente de la entidad, que se ha caracterizado por diversas ejecuciones vinculadas con el crimen organizado durante los últimos meses.
En esta ocasión, el cuerpo de un hombre fue encontrado dentro de una bolsa de plástico en la esquina de las calles Alta Tensión y Aeropuerto, en el municipio de Nezahualcóyotl.
Mientras que un segundo cadáver fue localizado en las aguas residuales del Canal de Acapol, en el municipio de Valle de Chalco.
En ambos casos las víctimas, que no han sido identificadas, presentan heridas y huellas de tortura.
Peritos de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM), acordonaron ambas zonas para iniciar las investigaciones y esclarecer las muertes.
Apenas el pasado domingo, fuentes policíacas reportaron el hallazgo de cuatro personas muertas frente al internado de la Villa de las Niñas, ubicado en la colonia Marco Antonio Sosa, en el municipio de Chalco.
Mientras que el pasado 3 de enero, un hombre y una mujer sin vida fueron encontrados sobre un camino de terracería en la colonia Emiliano Zapata, también en el municipio de Chalco.
Las víctimas fueron un hombre y una mujer de entre 25 y 30 años de edad, estaban amarrados, con la cabeza vendada.
En todos los casos, las hipótesis de la Procuraduría General de Justicia de la entidad apuntan a su relación con el crimen organizado que impera en la zona oriente del territorio mexiquense.
