Israel Dávila
Atlacomulco. Edomex. 28 de mayo del 2018.- Dos de los municipios que en el estado de México no han experimentado la alternancia como San Felipe del Progreso y Atlacomulco se entregaron esta tarde noche a Andrés Manuel López Obrador.
El candidato presidencial de la coalición Juntos Haremos Historia fue recibido por más de siete mil vecinos de San Felipe del Progreso, en su mayoría mazahuas que bajaron de las 130 comunidades a la cabecera municipal para atiborrar la explanada donde se realizó el evento.
Más tarde, en Atlacomulco, tierra del presidente Enrique Peña Nieto, considerado como territorio eminentemente priista, la gente se montó en el techo de camiones, trailers, y hasta en puentes peatonales para ver al líder de las encuestas, pues la explanada del mercado contiguo a la terminal de autobuses fue insuficiente para albergar a los miles de vecinos que fueron a escucharlo y respaldarlo.
López Obrador fue moderado con el presidente Peña Nieto. No hubo críticas para el mandatario. Señaló que así se mantendrá pues Peña Nieto se comprometió a respetar el resultado electoral y prefiere darle el beneficio de la duda.
A los que sí tundió fue a los integrantes de la mafia del poder, al centenar de empresarios y políticos “que primero encumbraron a Peña Nieto, lo usaron y ahora lo desechan y lo traen como payaso de las cachetadas”.
A ello, les dijo que, quieran o no, en 34 días perderán el poder en el país pues la gente saldrá a votar por Morena para lograr la cuarta transformación del país.
Andrés Manuel López Obrador llegó a San Felipe del Progreso pasadas las 16:horas. Ya lo esperaban al menos 7 mil personas en una explanada ubicada a un costado de la Plaza Estado de México que construyó Eruviel Ávila.
Tuvo complicaciones para llegar al presídium, pues la gente se le avanzaba, lo abrazaba, lo jalaba o lo acariciaba. En el presídium recibió el bastón de mando de la etnia mazahua y fue ataviado con un gabán de lana hecho por mujeres de esta etnia mexiquense. El tabasqueño hablo más de 60 minutos a la concurrencia que siguió atenta cada una de sus palabras. Constantemente fue interrumpido por el grito de “presidente, presidente” y una y otra vez, el tabasqueño les prometió que no les va a fallar.
En Atlacomulco, le fue negada la plaza principal, donde las autoridades municipales del PRI colocaron un brincolín para diversión de los niños. El brincolín lució vacío toda la tarde. Muchos de los menores acompañaron a sus padres a ver al delantero en las encuestas a un mitin en la plancha del mercado que se ubica a un costado de la terminal de autobuses.
El lugar también quedó chico para albergar a los más de 8 mil asistentes. Algunos subieron a toldos de camiones, trailers y hasta a las plantas de luz para seguir el mensaje de López Obrador. Otros lo siguieron a la lejos desde un puente vehicular y puente peatonal.
Ahí, el candidato presidencial volvió a dejar en claro estar “al 100 por ciento de salud , por más que me quieran enfermar”
Habló de los apoyos que de manera universal recibirán cada mes adultos mayores, madres solteras, y los jóvenes estudiantes de preparatoria y universidad durante su mandato y de cómo logrará cambiar la percepción que hay del extranjero hacia México para que ya no sea catalogado como un país corrupto e inseguro.