Redacción
Toluca, Edomex. 24 de mayo del 2020.- La ex dirigente de la Organización de Pueblos y Colonias (OPC), de Chimalhuacán, María Eulalia Guadalupe Buendía Torres, mejor conocida como “La Loba”, falleció esta madrugada, en un hospital privado de Toluca a consecuencia de un paro cardio-respiratorio.
El pasado 15 de mayo fue trasladada del penal de Santiaguito, donde se encontraba presa desde agosto del 2000, a una clínica privada por complicaciones de un padecimiento de diabetes que le aquejaba hacia varios años, pero el hospital confirmó que tras una prueba salió positiva a Covid.
Esta mujer que, durante décadas fue el brazo controlador del PRI en Chimalhuacán, purgaba una pena de 50 años de prisión, tras haber provocado un enfrentamiento en el que murieron una decena de personas y 52 resultaron lesionados el 18 agosto del 2000.
En las primeras horas de este domingo, la agencia de noticias MVT difundió la versión de la muerte de Guadalupe Buendía, la cual fue confirmada por autoridades alrededor de las 9:00 de la mañana.
Guadalupe Buendía Torres, enfrentaba una condena de 50 años de cárcel por los delitos de homicidio, lesionados, daño en los bienes, ocupación ilegal de edificios e inmuebles destinados al servicio público, que imputó la entonces Procuraduría General de Justicia del Estado de México, en agosto del 2000, tras haber provocado un enfrentamiento entre sus seguidores, con el objetivo de impedir la asunción de su adversario político, Jesús Tolentino Román Bojórquez, líder de Antorcha Campesina y Popular, como presidente municipal.
Tanto “La Loba”, en ese entonces, dirigente de la Organización de Pueblos y Colonias (PPC) como el movimiento de Antorcha se habían dedicado a fraccionar de forma ilegal el municipio de Chimalhuacán, lo que les dio poder de control dentro del territorio de ese municipio.
Por años, esta práctica fue tolerada por los gobiernos estatales del PRI, pues tanto la Loba como Antorcha, garantizaban una gran cantidad de votos a favor del tricolor.
En el 2000, el PRI hizo candidato a la presidencia municipal de Jesús Tolentino Román, quien también hoy es presidente municipal de Chimalhuacán, pero “La Loba” nunca lo aceptó como candidato y cuando éste se aprestaba a tomar posesión del cargo, Guadalupe Buendía movilizó a sus huestes para impedirlo, provocando un enfrentamiento que dejó al menos 10 muertos y más de 50 heridos.
Durante varios días, “La Loba” estuvo prófuga de la justicia hasta que fue localizada en una pequeña casa en el municipio de Zinacantepec, donde se escondía.
El 25 de agosto fue ingresada al penal de Santiaguito, junto con su esposo José Adelaido Herrera Delgado y su hijo Hugo Adelaido Herrera Buendía.
Más adelante, se le imputaron los delitos cometidos por fraccionador y despojo, y apenas, hace tres años, fue detenida una de sus cómplices Adriana Reyes Retana, que también fue ingresada al penal de Santiaguito, donde La Loba era toda una celebridad, pues versiones periodísticas apuntan a que todos los años se le permitía el festejo de su cumpleaños con todo y mariachi.
