Toluca, Edomex. 12 de mayo de 2015.- Las encuestas electorales arrojan que en la próxima legislatura federal, al menos unos 200 diputados federales –entre espacios de mayoría y plurinominales-, serán para el PRI y con ello le alcanzará para tener una mayoría simple en lo que resta del gobierno peñista. De la cifra total, se prevé que al menos unos 40 legisladores corresponderán para el priísmo del Estado de México, cuna del presidente Enrique Peña, que buscará imponer condiciones de hegemonía desde San Lázaro a favor de su grupo político a la salida de Beltrones.
La coordinación de la fracción priísta parece ya muy amarrada para César Camacho Quiroz, exgobernador mexiquense y actual dirigente nacional priísta. Otros dos liderazgos que serán clave, son los primos del presidente, Alfredo del Mazo Maza por Huixquilucan y Carolina Monroy del Mazo. Ambos parecen tener una comisión legislativa en sus aspiraciones. Alfredo y Carolina, quien despegue en la carrera se convertirá en precandidato natural para la gubernatura en 2017.
Otro personaje que parece con futuro incierto es Carlos Iriarte Mercado, actual dirigente estatal del PRI, pero que en todos sus recorridos de campaña se hace acompañar por Erasto Martínez. Iriarte quería seguir los pasos de su tutor Arturo Montiel, para llegar a la gubernatura desde la dirigencia priísta, pero dadas las condiciones será mejor que abandone el barco. Carlos será diputado plurinominal, pero se enfrentará a diputados con estirpe y ahí quedará en amplia desventaja.
Para completar la lista de grandes operadores priístas en la próxima legislatura federal se deberá atender los casos de Martha Hilda González y Marcela Salas. Una originaria de Toluca y la otra de Ecatepec. Martha Hilda y Marcela ya fueron legisladoras federales en 2006. Entre ambas pueden convertirse en enclaves necesarios para el control político de San Lázaro en manos de Atlacomulco. El resto será parte de la bancada más influyente en la legislatura federal.
Aunque no va por el Estado de México, es importante seguir a David López Gutiérrez que será legislador en representación de Sinaloa. El eterno jefe de prensa de Peña Nieto buscará la gubernatura de su estado natal, pero antes deberá rendirle buenas cuentas a su jefe desde la legislatura federal. López también representa los intereses del delmacismo, y será parte del grupo que apoye a Alfredo en su proyecto personal.
En esa misma circunstancia se inscribe Enrique Jackson Ramírez, exsenador de la República y parte del Tucom que apoyo la fallida precandidatura presidencial de Arturo Montiel en 2005. Jackson es el primer jefe visible en la chata carrera política del hoy influyente jefe de oficina presidencial, Aurelio Nuño. Además entre Jackson y Camacho también hay vínculos indivisibles que no pasan inadvertidos, cuyas alianzas podrían comenzar a delinear las proyecciones políticas de la sucesión presidencial.
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