Toluca, Edomex; 6 de abril de 2020.- El presidente López Obrador marcó la agenda del fin de semana. Los efectos en el Estado de México resultan previsibles. El gobernador Alfredo Del Mazo dará un espaldarazo a las acciones anunciadas por Andrés Manuel. Los proyectos de Santa Lucía y del Tren México – Toluca se mantienen vigentes. La preocupación en todos los sectores, se concentra en la desaceleración económica y la eventual pérdida de empleos.
López Obrador y Del Mazo están urgidos en crear empleos. El primero, prometió dos millones de empleos en los próximos nueve meses en todo el país. El segundo, tiene como meta un millón de empleos al término de seis años (de los cuales ya casi cumple tres). Lo cierto es que, las fuentes laborales se registran ante el IMSS. Presentar a beneficiarios de programas sociales como nuevos empleos sería una absoluta farsa. No hay señales positivas por ningún lado.
Sólo para poner una cifra en contexto: en 2009, en medio de la influenza y la crisis económica mundial, el país perdió 171 mil fuentes de trabajo. En contraste, en los últimos diez años, el 2017 tuvo el mejor registro con 800 mil nuevos empleos. En resumen: los indicadores apuntan a la pérdida de empleo formal; y en la última década, ningún escenario da para soñar con dos millones de empleos. El escenario es muy desolador frente a una cuarentena incierta.
Ayer salió López Obrador, y todos lo culpan por lo que viene hacia adelante. Sin embargo, es imprescindible considerar las acciones que asuman los gobiernos locales. A nivel estatal, Enrique Jacob y Martha Hilda González permanecen impávidos. Y los alcaldes, en su mayoría, apuestan a la inacción porque los temas de salud no son facultad propia. Pero poco hacen para impulsar la economía local y favorecer a los micro y pequeños comerciantes.
Este lunes, iniciaría la Semana Santa, pero todo proyecto turístico está suspendido. Ahí también se tendrá un efecto negativo en el plano económico. La contingencia sanitaria les tiene un futuro incierto para el resto del año. Lo mismo ocurre con el ciclo agrícola, donde los efectos de la emergencia sanitaria podrían ser devastadores para el campo mexiquense. Pero ni Evelyn Osornio ni Díaz han presentado un esquema de apoyo a los sectores productivos del estado.
Después de permanecer más de un año en el ostracismo discursivo, Alejandra del Moral volvió a asumir una postura de oposición. Tras el informe presidencial, la dirigente priísta arengó en contra del tabasqueño. Del Moral fustigó al actual gobierno federal como populista, de corte autocrático con simulación democrática. En sus redes sociales tildó al presidente de mesiánico. Muy pronto, acusarán de recibido en Palacio Nacional. Las elecciones están muy cerca, y la cordialidad está en riesgo. ¿La relación AMLO – Del Mazo se quiebra?
Comentarios a contacto@www.planamayor.com.mx
