Toluca, Edomex. 04 de septiembre de 2017.- Alfredo del Mazo tiene una afinada lista de posibles integrantes de su gabinete. Desde al menos cuatro oficinas de sus colaboradores más cercanos, se proyectaron posibles secretarios y secretarias, con sus respectivos equipos. Las propuestas incluyen subsecretarios, coordinadores generales y directores generales. La depuración está en marcha. Los titulares de las secretarías serán avisados hasta la semana próxima para evitar especulaciones, rumores y filtraciones en la prensa local.
En ese mismo lapso, nadie debe descartar posibles cambios en el gabinete presidencial de Enrique Peña Nieto. Los ajustes del equipo peñista tendría dos objetivos: apuntalar el juego sucesorio presidencial diseñado desde Los Pinos; y en segunda instancia, fortalecer al cuadro delmacista con refuerzos peñistas. El atlacomulquense prepara la sucesión, pero también el regreso a casa. ¡Preparen sus apuestas!
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Las lealtades de Ana Lilia Herrera parecen de plazos cortos. Hace poco más de un año, Eruviel la designó secretaria de Educación del estado. Ana Lilia se convirtió en la carta eruvielista por la candidatura a gobernadora. A la par, Herrera acompañaba el sueño presidencial del mandatario mexiquense. Tras el fracaso, la exalcaldesa de Metepec optó por renunciar a su cargo al gabinete y regresar a su escaño al Senado.
En los últimos sesenta días, Ana Lilia se reunió repentinamente con José Narro, otro aspirante presidencial priísta. Ana Lilia operó en solitario con Emilio Gamboa -quien también apoyó su aspiración por la gubernatura-, para ser ungida como presidenta de la Junta de Coordinación Política, pero bajo la tutela de Gamboa, el mismo que de un plumazo borró a Eruviel de la contienda interna priísta. Eruviel muy pronto acusará de recibido esos mensajes.
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Una incógnita existe con el futuro del Partido del Trabajo en el Estado de México. Ayer, Alejandro González Yáñez -exalcalde de Durango y hermano de Óscar- renunció a su militancia petista para sumarse al Movimiento de Regeneración Nacional de López Obrador. De momento, Óscar González no se ha pronunciado sobre una eventual adhesión morenista. Lo cierto es que en la reciente elección, Óscar se opuso a declinar por Delfina Gómez, hasta que fue obligado por la dirigencia nacional petista. La relación entre Óscar y Andrés Manuel no transita por su mejor momento desde hace algunos años.
En la apuesta de Óscar, no resulta muy atractivo abandonar el PT, donde ha logrado vivir del presupuesto público durante los últimos 23 años. La eventual salida de González Yáñez para afiliarse al Morena, implicaría en ser uno más, en un partido hoy bajo la dominancia de la camarilla de Texcoco, que comandan Higinio Martínez y Horacio Duarte. Y en esa ecuación, Óscar prefiere mantener como cabeza de ratón, a integrarse como cola de león.
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