Redacción
Madrid, España. 9 de junio de 2014.- La reyerta de San Salvador Atenco ocurrida el 3 y 4 de mayo de 2006 persigue al exgobernador mexiquense Enrique Peña Nieto a ocho años de distancia, y en giras internacionales, a través de organizaciones defensoras de derechos humanos que lo responsabilizan de la actuación de la policía estatal que incurrió en violaciones sexuales, detenciones arbitrarias y el asesinato de dos jóvenes.
En la vista de Estado que realiza por Madrid, el mandatario mexicano Enrique Peña Nieto fue interpelado por un par de ciudadanos españoles que irrumpieron durante la intervención del mexiquense, en un encuentro desarrollado en el Teatro Real con empresarios de aquel país.
Con un par de pancartas, dos personas –un hombre y una mujer- arengaron que Peña Nieto era responsable de la “matanza de Atenco”, mientras intentaban desplegar sus pancartas con la leyenda “Malvenido”.
Los jóvenes españoles fueron retirados del lugar por agentes de seguridad tanto de España como de México, que resguardan a la delegación del Presidente Enrique Peña en su gira por Madrid.
Esta es la primera gira del mexiquense por España desde que se convirtió en Presidente de México en diciembre de 2012.
En los hechos violentos de San Salvador Atenco, cuyas violaciones a los Derechos Humanos se han denunciado en la Audiencia Nacional de España, se registró la detención de 207 personas -entre ellas 10 menores de edad-, violaciones sexuales a 26 mujeres, incluidas dos ciudadanas de origen español, y la muerte de Alexis Benhumea y Javier Cortés, así como la expulsión de cinco ciudadanos extranjeros -entre ellas las dos españolas violadas, María Sastres y Cristina Valls.
Apostados al exterior del Teatro Real, colectivos se manifiestan en protesta por la visita de Enrique Peña a quien responsabilizan de lo ocurrido en Atenco el 3 y 4 de mayo del año 2006.
