Redacción
Toluca, Edomex 7 de agosto del 2016.- El constante encarecimiento de los precios del diésel y los insumos aprietan a los transportistas del Estado de México, quienes han amagado en varias ocasiones con aumentar las tarifas de forma unilateral, ante la negativa de las autoridades mexiquenses por realizar revisiones a la tarifa y a las condiciones del servicio.
De acuerdo con transportistas las actuales condiciones en las que se presta este servicio van en detrimento del propio transporte, ya que la última vez que se realizó una modificación a la tarifa fue en mayo de 2013, cuando el litro de diésel se encontraba 11.72 pesos.
Desde aquella época a la fecha, este combustible ha sufrido un incremento del 17.49 por ciento, aunque hubo momento de mayor inflación, donde el precio se disparó por arriba de los 14 pesos por litro, con un incremento del 21.16 por ciento, respecto a mayo del 2013, cuando se hizo la última modificación tarifaria al pasaje.
Ante esta situación empresarios como choferes aseguran que el transporte tiene pocas posibilidades de mejorar si no se aplican programas que apoyen al transportista, ya que hasta el momento el “reordenamiento” que aplica la Secretaría de Movilidad mexiquense ha aumentado la carga económica para este ramo, sin que se brinden opciones para mejorar las condiciones en las que se presta el servicio.
“Hace un mes vimos que se incrementaron los precios de las gasolinas, hoy también vemos un incremento en el precio del diésel y para nosotros es un doble golpe, adicional que se han incrementado el costo de los peajes en las autopistas y todo esto representa inflación, primero por los costos directos que tenemos que pagar y posteriormente por el aumento en nuestros insumos y costos operativos que se van incrementando.”, señaló Odilón López Nava, delegado de la Cámara Nacional de Autotransporte, Pasaje y Turismo (Canapat)en el Valle de Toluca
Este incremento en los precios ha sido resentido no solo por los empresarios transportistas, ya que el impacto directo del aumento de los combustibles se refleja en los ingresos de los operadores, quienes realizan el pago del diésel de camiones que en promedio tienen capacidades de 150 a 200 litros, lo que provoca que se tengan aumentos superiores a los 200 pesos por tanque de combustible.
“Nosotros somos los que realmente pagamos la gasolina de las unidades, y hoy tenemos que andar más rápido y peleándonos con el resto de los camiones por el pasaje, de por sí, en un día bueno, nos llevábamos 150, 200 pesos para nuestra casa; ahora solo 80, 100 pesos, porque los patrones no bajan las cuentas, nosotros seguimos pagando lo mismo.”, señaló Rogelio Hernández, operador de autobús en la ciudad de Toluca.
Sin embargo, los empresarios del transporte aseguran que a pesar de que se ha advertido a las autoridades la necesidad de que se presenten mesas de diálogo para mediar esta situación, hasta el momento no se han llevado a cabo y ante la cercanía del periodo electoral dudan que se pueda realizar un ajuste a la tarifa para evitar mayores afectaciones a este sector.
