Redacción
Ciudad de México, 13 de julio de 2020.- El gobernador del Estado de México, Alfredo Del Mazo Maza se reunió, la mañana de este lunes, con el presidente, Andrés Manuel López Obrador para revisar avances en la obra del Tren Interurbano México – Toluca, el cual pretende ser concluido hacia el año 2023, es decir, en los últimos meses del sexenio del mexiquense.
Desde el inicio de su mandato, el titular del Ejecutivo Federal se comprometió a desarrollar la construcción total del proyecto ferroviario por considerar que “ya se ha invertido mucho dinero”.
En diciembre del año pasado, las obras del Tren México – Toluca se reactivaron como resultado de una gestión presupuestal realizada por el gobernador Alfredo Del Mazo, y una reasignación administrativa que permitiera reactivar las tareas de infraestructura.
A través de su cuenta de tuiter, el gobernador Del Mazo Maza anunció que este lunes se reunió con el presidente López Obrador, en donde evaluaron los avances de la obra del Tren que conectará Toluca con la Ciudad de México.
A pesar de la actual contingencia sanitaria, en distintos tramos del proyecto ferroviario se desarrollan distintas obras, lo que permite establecer que los trabajos continúan con el propósito de concluir su edificación y facilitar la conexión entre ambas ciudades.
El proyecto estaba contemplado con un costo de 39 mil millones de pesos, pero a la fecha ya se han invertido más de 60 mil y todavía restan unos 30 mil más, según lo ha expresado el propio titular del Ejecutivo.
Además, el tren Interurbano México – Toluca, está considerada como una de las obras de interconexión para el sistema aeroportuario del centro del país, el cual contempla el actual Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, el nuevo aeropuerto en la base militar de Santa Lucía y la terminal aérea de la capital mexiquense.
También el año pasado, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes federal anunció que, ante la imposibilidad financiera del gobierno federal para concluir las obras del Tren México – Toluca, ya analizaba alternativas de inversión privada en el proyecto ferroviario, lo que implicaría que su operación fuera concesionada al sector empresarial interesado en el mismo.
Por su parte, el año pasado, el gobernador del Estado de México, Alfredo Del Mazo Maza convocó a una firma de convenio entre la administración estatal con los municipios de Lerma, Metepec, Ocoyoacac, San Mateo Atenco, Toluca y Zinacantepec, para establecer un mecanismo de coordinación metropolitana y aprovechar el impacto de la construcción y la puesta en marcha del Tren Interurbano México-Toluca, en esta región de la entidad.
Hasta el momento, se evaluaron 30 mil predios que están distribuidos en los 29 kilómetros del corredor de esta obra de infraestructura que pertenecen a la entidad. Con base en estos resultados, se estima que este corredor podría generar más de 80 mil nuevos empleos y llegar a 320 mil habitantes en los próximos años.
El Tren Interurbano México-Toluca tendrá 57.7 km de longitud y atravesará los municipios de Zinacantepec, Toluca, Lerma, Metepec, San Mateo Atenco y Ocoyoacac en el Estado de México y las alcaldías Álvaro Obregón y Cuajimalpa en la CDMX.
Inicialmente, se tenía contemplado ser inaugurado en noviembre de 2017, sin embargo, distintos retrasos en las obras de construcción; además de inconsistencias relacionadas con sobreprecios, han impedido su conclusión.
En febrero de este año, el director general de desarrollo ferroviario e intermodal, José Manuel González Parra informó que para finales de este año deberán estar concluidos los tramos 1 y 2 del tren, que van del la terminal de Zinacantepec a la Marquesa y de la Marquesa a Cuajimalpa, en lo que será el betunes de 5 kilómetros.
También debería haber avances «sustanciales en el tramo 3 que le corresponde al gobierno federal, que van desde Cuajimalpa hasta Santa Fe, que a inicios de año iba al 50 por ciento. Lo que quedaría pendiente para los dos años siguientes, sería la obra civil de Santa Fe a la terminal Observatorio, la colocación de rieles y sistema de electricidad en todos los tramos y las pruebas ya de la operación del tren que deben ser por lo menos de seis meses.
