Redacción
Ciudad de México, 24 de octubre del 2019.- Autoridades Federales, de la Ciudad de México y del Estado de México acordaron instalar una mesa de diálogo con las organizaciones de recolectores de chatarra; lo que determinó levantar los bloqueos en las principales vías de acceso a la Ciudad de México, los cuales se realizaron en protesta por una presunta privatización de los sitios de disposición final de la basura.
Desde las 10:30 horas se comenzaron a reportar movilizaciones para obstruir las autopistas México-Querétaro a la altura de la caseta de Tepotzotlán; la México-Pachuca, a la atura del Vigilante; la México-Toluca en la zona de La Marquesa y la México-Puebla a la altura de Chalco.
También se tuvo bloqueada la México-Cuernavaca y la Toluca-Atlacomulco, en la caseta de El Dorado.
Cerca del mediodía, integrantes de la Guardia Nacional arribaron a las casetas de autopistas en donde se tenían los bloqueos por parte de inconformes.
En un acuerdo inicial, se ha establecido instalar una mesa de diálogo entre las organizaciones de recolectores de basura con autoridades ambientales de la capital del país y la entidad mexiquense, para resolver sus inquietudes respecto de una eventual privatización de los sitios de disposición final.
A través de sus redes sociales, la Guardia Nacional informó que ha sido abierta la circulación en las casetas México-Querétaro, México-Puebla, México-Tlalpan, México-Chalco y México-Toluca. “Personal de la #GuardiaNacional dialogó con los manifestantes en un ambiente de respeto y tolerancia”, detalló.
Ayer miércoles, los gobiernos locales de ambas entidades sostuvieron una reunión de trabajo donde se determinó intensificar la coordinación para mejorar las acciones de disposición final de desechos sólidos. Sin embargo, no existieron detalles específicos en los comunicados institucionales de dichas tareas.
A lo largo de este jueves, miles de automovilistas se encuentran varados en estas autopistas, pues los chatarreros se niegan a abrir el paso a los vehículos.
La protesta fue encabezada por la Confederación Nacional de Industriales, Metales y Reciclados, quienes se oponen a que los sitios de disposición final queden en manos de particulares, pues esto cancelaría la posibilidad de acceder a los residuos que pueden ser reciclados.