Por Juan Carlos Cartagena Abaurre
¿Ya viste el tuit de Medrano? Con eso inició un día decepcionante, triste y lleno de enojo para un servidor. Tomé el teléfono y tras hacer una que otra llamada a mis gurús (uno que otro si acabó la Universidad) había dos versiones que apuntaban al mismo final: Potros no tenía más de 6 meses de vida, dejaría de competir en la liga de ascenso; un día después, de un balazo, se dio el anuncio.
Ojo, ahí está la clave.
Si los potros son desafilados por falta de solvencia económica:
1.- Nunca más podrá ser parte del fútbol profesional, en ninguna de sus categorías.
2.- El daño al patrimonio de la UAEM es de 25 millones de pesos aproximadamente.
3.- Raúl Zúñiga, pretendido por algunos equipos, vale 1 millón de dólares cuando menos; suficiente para pagar el torneo, salvar al menos la desafiliación, y el golpe político que esto conlleva.
Intentos por salvar al Potro
Tras el mal momento de la UAEM todo empezó a complicarse hace un par de torneos, se pensaron varias maniobras para salvar al equipo, mismas que parecían más desesperadas que convenientes. Por ejemplo, el convenio con Atlas, que con más colmillo y aprovechándose de la situación propuso hacerse cargo de los gastos de administración, plantel y cuerpo técnico, a cambio de una cifra cercana a los 40 millones de pesos, que era casi lo que se tenía que invertir en el torneo.
Así como Atlas, llegaron otras propuestas al “Patronato”; Irapuato, Tamaulipas (que incluso ofrecía 15 millones y una franquicia de Premier) estuvieron interesados en hacerse de la franquicia, sin llegar a un acuerdo económico. Hoy, les explotó en las manos, por no saber qué hacer con la responsabilidad que conlleva un equipo profesional. Otra opción fue la familia San Román, pero las condiciones no fueron las ideales, pues el equipo está sumido en el tema del cociente del descenso.
Patronato sin cabeza
El maestro Pedro Guadarrama sabe de fútbol lo que yo de bioquímica; quizá ni patear un balón sepa, y para muestra un botón: Antes del juego vs Tampico bajó a preguntarle al “Potro” Gutiérrez como le Iban hacer para cumplir con la regla del menor. Sí, en la última jornada, y además sin notar que “El potro” ya tenía en su once la solución. Guadarrama es gente de confianza del rector, el puesto le quedó tan grande, que pocas veces atendía en persona.
¿Quieren otra? Mientras el equipo dejara de jugar y corre riesgo de ser desafilado en todas sus categorías, su “Director General” Víctor Jaimes no se encuentra en el país. Seguramente a su regreso, al igual que Pedro Guadarrama, no tendrán problema y lo reubicarán en algún puesto, pero no así la gran cantidad de personas que dependen de esta decisión.
Factores que afectan
La ley anti lavado que ha entrado en vigor, “la estafa maestra”, la deuda con el ISSEMyM, hacen pensar que son claves en lo que hoy en día sucede con los Potros UAEM. Los últimos años el equipo fue olvidado, y la consecuencia es perder una franquicia de ascenso de 25 millones de pesos.
Los jugadores
El caso no fue como Veracruz, afortunadamente no hay adeudos, y ayudó que la mayoría son jugadores cuyo contrato acaba en 6 meses. Con ellos se ha llegado al acuerdo de tres meses de sueldo.
Conclusión
Al a la UAEM hoy en día no le interesa el fútbol profesional, pero si le va interesar que un problema deportivo derive en uno político. Si esta administración no quiere pasar a la historia por un daño patrimonial fuerte, deberá hacer algo para salvar la desafiliación en todas sus categorías. La necedad de quedarse la franquicia la han pagado caro, pero aún tienen una solución y se llama Raúl Zúñiga.
#SiemprePotro
Gracias por leerme y jugar conmigo.