Toluca, Edomex; 24 de junio de 2019.- Alejandro Moreno y Carolina Viggiano recibieron la “cargada”, tanto de la militancia como de la cúpula priísta, en su registro por la dirigencia nacional del PRI. La fórmula Moreno – Viggiano pretenden desmarcarse de las élites políticas, sin embargo, sus vínculos son indisolubles. Alito se convirtió en gobernador, en la cúspide del Grupo Atlacomulco, con Enrique Peña como presidente y César Camacho como dirigente nacional del priísmo. La cercanía es innegable a la clase mexiquense.
Viggiano, por su parte, forjó sus relaciones con los de Atlacomulco, en su paso por la LXI Legislatura. Carolina trabajó en el sexenio peñista como titular del Consejo Nacional de Fomento Educativo, bajo el mando de otro exgobernador mexiquense, Emilio Chuayffet, al frente de la SEP. Ganó una diputación federal, siendo coordinador de la fracción, César Camacho. Viggiano es, además, parte inseparable del Grupo Hidalgo, el mismo que cogobernó el sexenio pasado con el Grupo Atlacomulco.
El sábado pasado, junto con Alito y Viggiano, se vio la sombra de Héctor González Escobar, quien coordinó la secretaría de prensa del PRI mexiquense en los tiempos de Isidro Pastor. El sexenio pasado trabajó con el Chilorio Power encabezado por David López en Los Pinos.
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Ayer en Metepec, el calderonismo realizó su asamblea distrital en Metepec para la conformación del nuevo partido político México Libre. Desde la semana pasada, a través de sus redes sociales, el expresidente Felipe Calderón y Margarita Zavala, invitaron a sus simpatizantes a sumarse a su nuevo partido. Con una afluencia superior a las 300 personas, México Libre completó su trámite en la tercera convocatoria que alcanza en el Estado de México. Aún muy lejos de la meta de 200 asambleas que debe reunir a nivel nacional.
Como coordinadora de México Libre en Metepec, reapareció Elisa Quijada, excandidata del PAN a la alcaldía en los comicios del año pasado. Aun cuando Margarita Zavala había renunciado a la candidatura independiente por la Presidencia de México, siempre mostró su arropo a Quijada.
El panismo colapsa por dos frentes: los muchos alcaldes y funcionarios que hoy despachan bajo la insignia de Morena. Y ahora, los vacíos que le va generando, palmo a palmo la ambición calderonista de tener su propio partido político.
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En el priísmo mexiquense, sigue su curso la contienda interna de la Red de Jóvenes. La diputada local, Brenda Aguilar reunió a las lideresas jóvenes para mostrar su respaldo a su candidata: Monserrat Ortiz. Ambas, encabezaron un encuentro con dirigentes municipales, para fortalecer la promoción rumbo a la consulta a la base dentro de dos semanas. En una elección que parecía de trámite, los grupos políticos se van adhiriendo a un puñado de muchachos.
También el sábado anterior, el otro candidato con fortaleza, César Javier Barrios, recibió el espaldarazo de Héctor Velasco Monroy. Un peñista de cepa, exsecretario particular adjunto del atlacomulquense y exdirector de Diconsa. El también exlíder de la CNC estatal, reconoció el liderazgo de su padre hace algunos años en el sector campesino. “Con emoción me uno a tu decisión por la búsqueda del liderazgo juvenil en el PRI Estado de México”, escribió en sus redes sociales.
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