Israel Dávila
Toluca, Edomex. 22 de julio del 2018.- El gobernador del Estado de México, Alfredo Del Mazo Maza, turnó al Congreso mexiquense una iniciativa para crear una nueva Ley de Seguridad Social que, antes que nada, le dé viabilidad financiera al Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios (ISSEMyM), que se encuentra a punto de colapso; modifique el esquema de pensiones en la entidad y garantice la prestación de servicios médicos que brinda esta institución a más de 370 mil burócratas y sus familias.
Desde su llegada a la gubernatura, Alfredo Del Mazo ya había alertado de la crisis financiera que enfrentaba el ISSEMyM presionado por la altísima carga del sistema de pensiones en la entidad, lo que implicaba emprender una reforma profunda como lo planteó en su Plan Estatal de Desarrollo aprobado por el Congreso en marzo pasado.
La última reforma a la Ley de Seguridad Social fue la que diseñó y emprendió Enrique Peña Nieto en 2002, cuando fue secretario de Administración en el sexenio de Arturo Montiel, donde se elevó el de 30 a 35 años el periodo de años en servicios para poder jubilarse y pasar de los 48 a los 57 años en principio, y luego a los 62 años, en una reforma exprés en 2012, para pedir la jubilación por vejez.
La propuesta de Alfredo Del Mazo de la nueva Ley de Seguridad Social implica armonizar la ley estatal con lo que ocurre a nivel federal. Se pasaría de un esquema mixto y solidario de pensiones a uno de cuotas individualizadas para cada uno de los servidores públicos y las cuotas y aportaciones serían administradas por la Afore preferida del derechohabiente.
De acuerdo con la exposición de motivos de la nueva Ley, el ISSEMYM es el tercer instituto de seguridad social más grande del país, solo detrás del IMSS y del ISSSTE, pues tiene más de 375 mil servidores públicos que trabajan en la administración estatal y en los municipios y organismos descentralizados.
El documento señala que gran parte de los jubilados por el ISSEMYM recibe salarios superiores a los trabajadores en activo. En la actualidad existen seis servidores públicos en activo por cada pensionado, pero ya se requieren casi 8 servidores públicos para mantener la nómina de pensiones.
Además las cuotas y aportaciones para el Sistema Solidario de Pensión que equivalen al 13.52 por ciento del sueldo de los servidores públicos, lo cual ya resulta insuficiente, ya que el gasto por pensiones es equivalente a alrededor del 16% de sueldo de los servidores públicos en activo.
En la iniciativa se advierte: “El Sistema Solidario de Pensiones del ISSEMYM resulta insostenible. Este sistema está proyectado para entrar en déficit en algún momento del próximo año. Actualmente el ISSEMYM paga pensiones mes a mes a un grupo de 59 mil 610 derechohabientes, pero en el próximo lustro la cifra se puede duplicar”.
La iniciativa plantea que a partir de ahora, se abran cuentas individualizadas por cada servidor público y ahí se puedan administrar las cuotas y aportaciones para las pensiones.
También incorpora la figura de la pensión garantizada, para que todo servidor público pueda tener un ingreso mínimo en su vejez por un monto aproximado de 2 mil 786 pesos, si sus aportaciones resultan insuficientes.
La burocracia que cuenta con años trabajando en el servicio público tendrá tres meses para determinar si sigue con el esquema actual pensiones (mixto y solidario) o se muda al de esta ley (de cuotas individualizadas).
También se les respetará el tiempo de 30 años de servicio para poder jubilarse si ingresaron antes del 2002 o de 35 años si fue después de ese año.
La edad para jubilarse pasará de 62 a 65 años, pero ahora solo será necesario acreditar 25 años de cotización al Instituto.
La iniciativa ya fue turnada a comisiones de dictamen para su análisis y eventual aprobación y se aclara que con este nuevo ordenamiento estarían garantizados por servicios de salud para la burocracia y sus familias; y podrían continuar esquemas de préstamos hipotecarios y de otra índole para los servidores públicos.
