Redacción
Valle de Bravo, Edomex. 14 de agosto de 2014.- A unas horas de la llegada de cientos de efectivos del Ejército y la Marina que asumirían las tareas de seguridad en el sur del Estado de México, este miércoles fue levantado a plena luz del día y en la explanada principal de Luvianos, el presidente del comité municipal del Partido de la Revolución Democrática (PRD) Benito Jaimes Alpizar.
Personal del ayuntamiento que presenció la privación ilegal de la libertad, indicaron que sujetos con armas largas descendieron de vehículos sin placas, tomaron por la fuerza al líder perredista y lo obligaron a subir a una unidad que huyó con rumbo desconocido.
Mientras ocurrieron los hechos en pleno centro del municipio, no hubo ni policías estatales, ni elementos del Ejército y la Marina -que se encargan desde ayer de la seguridad de trece municipios del sur del estado- que impidieran que se consumara el delito.
Las policías municipales de Luvianos, Tlatlaya, Amatepec, Otolozapan Tejupilco, Zacazonapan, Temascaltepec, Sultepec, Zacualpan, San Simón de Guerrero, Ixtapan del Oro, Ixtapan de la Sal y Valle de Bravo, fueron obligados a acudir a un curso de adiestramiento con la Secretaría de la Defensa Nacional en Tlaxcala.
Este no es el primer hecho delictivo que ocurre en el centro de Luvianos y a la luz del día. En abril pasado, un comando armado ingresó al Palacio Municipal y allí acribilló a un comandante de la policía municipal y levantó a siete efectivos de seguridad, que horas después fueron hallados golpeados y amordazados en la sierra de Nanchititla, que colinda con Guerrero y Michoacán.
Hace diez días, un comando que descendió de un taxi disparó en contra de Indalecio Benítez, locutor de la radio comunitaria “La Calentana” cuando éste se disponía a ingresar en su domicilio ubicado a una cuadra de donde se encuentra el destacamento de la Marina. En estos hechos, el hijo del locutor de 12 años de edad perdió la vida.
Estos acontecimientos y otros reportados en los municipios limítrofes con Michoacán y Guerrero obligaron a las autoridades estatales y federales a duplicar la fuerza militar y policiaca en el sur del estado para tratar de disminuir los índices de violencia.
Con el nuevo operativo se supone que mil 187 efectivos de la Marina y el Ejército llegarían a estos 13 municipios, que sumados a los 890 desplegados previamente, habría una fuerza superior a dos mil elementos.
Valle de Bravo sí está sitiado
Donde sí se puede observar una amplia presencia del Ejército, la Marina y las policías Federal y estatal, es en Valle de Bravo, donde el domingo fueron secuestradas tres personas en un mismo hecho.
En un recorrido por esta demarcación se pudo constatar que se colocaron vehículos artillados del Ejército y la Marina en los accesos al municipio, mientras que las policías federal y estatal patrullan continuamente en las carreteras que conducen a esta demarcación.
Personal castrense realiza patrullajes en las calles de la cabecera municipal y comunidades como Avandaro, donde se ubican fraccionamientos campestres y casas de descanso, o bien en Colorines, que colinda con el municipio de Otzoloapan, limítrofe a Michoacán y donde se ha detectado la presencia de grupos del crimen organizado.
El alcalde de Valle de Bravo, Francisco Reynoso y prestadores de servicios de la zona rechazaron que exista una ola de secuestros como se manejó en algunos medios.
Las autoridades locales sólo enteraron de un caso donde tres hombres que viajaban en cuatrimoto hacia Otzoloapan fueron secuestrados. “Lo de la ola de secuestro, sólo es un rumor” repitió el alcalde panista.
Los índices delincuenciales son los de siempre, sostuvo el presidente municipal, y para mayor seguridad, añadió, se tomó la decisión de que tanto el Estado como la Federación nos apoyen con la vigilancia.
David Rodríguez, representante de los prestadores de servicios del municipio, informó que no hay un clima de inseguridad alarmante en Valle de Bravo como se ha tratado de hacer ver al exterior.
“Tan no hay ola de secuestros aquí, que esta temporada vacacional en Valle (de Bravo) estuvo lleno los fines de semana. Aquí las cosas están tranquilas; claro tampoco podemos decir que no pasa nada, porque de vez en vez, sabemos de una balacera, pero en general el turismo no es afectado por esas situaciones”.
