Por Juan Carlos Cartagena Abaurre
Toluca inició cómo acabó el otro torneo: perdiendo y recibiendo 3 goles. Si bien este Toluca mejoró a la pobreza que exhibió en pretemporada, con los lapsos de fútbol no va a alcanzar. Hoy se pudo llevar más goles, aunque también pudo marcar otros dos cuando menos. Los Diablos caen en la sultana.
El 11 inicial
El torneo lo empezaron con: García, “Dedos” López, Sauro, Mora, Chalá, Güémez, William, Rubens, Medina, Canelo y Estrada.
Goles
1-0 Pabón obliga que Chalá y Güémez salgan fuera de su zona, a partir de ahí las fichas rojas se fueron cayendo como si fuera fila de dominó. En el espacio Funes Mori fue letal para abrir el marcador.
2-0 Estefan Medina encuentra una avenida por su costado (Sambueza estaba agachado y Medina recorrido al centro).
2-1 Chalá desbordó y metió un tiro centro que pasó sacándole la lengua a todos, hasta que Alan Medina cerró la pinza para devolverle la vida a Toluca.
3-1 Nuevamente un mano a mano, en los que Monterrey es muy superior. Gallardo desborda y vence para llegar a línea final y tirar diagonal; en el centro del área Funes Mori decretó el triunfo.
La clave
Luego de 15 minutos de dominio alterno, con fútbol ordenado y transición rápida para atacar, Toluca se distrajo y en tres pases se encontró de frente al gol; a partir de ahí, el partido fue otro. Toluca muy abierto, roto en la cintura y muy pesado al momento de presionar. En la previa había manifestado que el equipo debía estar compacto. Treinta minutos carentes de esa característica les costó el juego.
Encontrar gol de regreso del vestidor, fue una inyección de motivación, pero entre tanto cambio y el estado físico, al diablo no le alcanzó el gas del efecto Sambueza.
Ojo ahí
Toluca tuvo dos jugadas muy claras en ofensiva que no fueron al marcador. Medina no quedó cómodo para disparar cuando el portero estaba vencido y la defensa salvó a Monterrey.
La otra, un disparo de William, rebotado por González, que Estrada de frente no pudo darle dirección de gol.
Conclusión
Nadie pone, ni pondrá, lo que da Sambueza. Mientras no se contagien los 90 minutos (o lo que dure el juego) del liderazgo y carácter del argentino, Toluca va a ser un fracaso. Cuando en la cancha entiendan cada reclamo, cada gesto, cada jugada de Rubens y se embarren de un poco de ella, el equipo va a tener llegada y si muere será de algo. Apuren las visas porque Sambueza no puede solo.
Gracias por leerme y jugar conmigo.