Toluca, Edomex. 9 de mayo de 2016.- El nuevo escándalo en torno a las finanzas internas del Grupo Televisa tendrá un impacto innegable e irrefrenable en el manejo de recursos públicos que ejercen los gobiernos estatales hacia la televisora más influyente del país. Miles de millones de pesos son pagados al consorcio de Emilio Azcárraga en “efectivo” de las finanzas públicas, según una indagatoria realizada por autoridades fiscales estadounidenses. En esa cauda, uno de los estados imputados es el Estado de México.
De acuerdo a la investigación realizada para la revista Proceso, por parte de Jenaro Villamil -colaborador de Plana Mayor-, entre 2012 y 2015, el gobierno mexiquense habría pagado extraoficialmente, un monto por 870 millones de pesos sólo el año electoral por pago de promoción. Para el año siguiente, la cifra se ubicó en los 560 millones; así en 2014 fue de 600 millones, y apenas el año pasado, que coincidió con comicios federales intermedios, se habrían pagado 800 millones.
La indagatoria apunta en dos datos que resultan clave. Por un lado, la perniciosa actividad de Televisa para cobrar cantidades en “efectivo” sumas millonarias que le permitan promoción personalizada a varios gobernadores. La situación negada por Azcárraga, ahora se topa de frente con la realidad, y pone en duda la credibilidad de la barra noticiosa televisiva. Poco a poco, palmo a palmo se confirma la especie de que se venden sus contenidos editoriales.
Mientras que del lado gubernamental, se ratifica el plan estratégico puesto en marcha desde hace una década a favor del entonces gobernador Enrique Peña para posicionarlo como un gobernante efectivo, con méritos telegénicos para ser candidato presidencial. El hoy presidente compró con subterfugios comerciales espacios en medios electrónicos para desmantelar a sus opositores e imponerse como el candidato presidencial. De ahí más gobernadores buscan seguir sobre la misma ruta, incluido el mexiquense Eruviel Ávila.
El pago en efectivo también tiene una consideración indispensable, se trata de un acto ilegal por ocultar ganancias a todos los socios de Televisa y evadir al pago de impuestos. Televisa ha encontrado las estrategias idóneas para controlar a la clase gobernante, incrementar sus ganancias económicas y lograr una cercanía inmejorable con quien ejerce el poder político. La indagatoria abierta en Estados Unidos, sin embargo, es de resultados impredecibles.
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