Vaya oportunismo de algunos personajes, disfrazados de organización civiles. Resulta que una desconocida agrupación denominada “Instituto Mexicano de Evaluación” anunció este lunes que otorgará premios a diputados del Estado de México, a decir de ellos, por su “valioso desempeño y aportaciones”. Pero la lista la encabezan legisladores muy cuestionados, ya sea por su intrascendente presencia en la legislatura, o por su ausentismo insultante, o por ni siquiera tener arraigo en el territorio estatal.
En el listado aparecen el diputado federal del PT Ricardo Cantú García, que es oriundo de Nuevo León, y por oportunismo político fue inscrito en la lista plurinominal del Estado de México, pero la militancia petista aquí ni lo identifica. Otros casos son los legisladores locales del PVEM, Alejandro Agundis; Xóchitl Arzola del PRD y Norberto Morales del PT, que están nominados pero para ganar el trofeo al más faltista en la cámara local. Mismo caso de Javier Salinas Narváez del PRD y Juan Ignacio Samperio de Movimiento Ciudadano.
El colmo, es que la organización cobra 18 mil pesos para darles el premio, que incluye un seminario de profesionalización. En el fondo, lo que no debe dejarse en la incógnita es qué diputados se atreven a recibir tan cuestionado galardón, y si el pago de dicho premio se realiza con cargo al erario público. Y a propósito de tan cuestionada organización, quién la representa y por qué.
—————
Muy defraudados se sientes amplios sectores del magisterio estatal. Primero fue la aprobación a las reformas de la Ley del Issemym que asestó un golpe a sus bolsillos en las cuotas aumentadas para prestaciones de seguridad social. Ahora, está por avanzar la reforma educativa, que para profesores de nuevo ingreso contempla evaluación educativa y rescisión de su relación laboral con el Estado para quien repruebe dichos exámenes. Cero y van dos.
En un paso atropellado, el gobierno mexiquense sacará adelante las leyes estatales de la reforma educativa, cuyo plazo de aprobación vence el próximo miércoles. La propuesta eruvielista que mantiene vigente la evaluación educativa puede abrir de nueva cuenta “la caja de pandora” para la disidencia de maestros que se oponen a ser calificados. El desenlace aún incierto podría derivar en protestas en las calles, y ausentismo en el salón de clases.
No cabe la menor duda, que el proceso legislativo será de fast track para dar trámite a la reforma que empujan con determinación dos exgobernadores de la entidad: el Presidente Enrique Peña y el secretario de Educación Emilio Chuayffet. Aun cuando en Oaxaca, las presiones de la CNTE han frenado cualquier intento de avanzar en la reforma, y el propio Chuayffet ha reconocido que quien no cumpla con las reformas, no será sancionado.