Redacción
Ante la imposibilidad de generar unidad por la dirigencia nacional del PRD en torno a la figura de su líder moral, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, la contienda interna perredista ha permitido la connivencia de “tribus” políticas antagónicas para alcanzar el control político del Comité Ejecutivo Nacional y de paso impedir el eventual ungimiento del exjefe de gobierno capitalino, Marcelo Ebrard al frente del partido del sol azteca.
Desde el Estado de México y el Distrito Federal, donde se registra el mayor número de militantes al PRD, las corrientes de Nueva Izquierda y Alternativa Democrática Nacional buscarán unir sus fuerzas y sus votos para hacerse del control político del Comité Ejecutivo Nacional de este instituto político.
Con la representación del Distrito Federal, el exsenador y exsecretario del Trabajo capitalino, Carlos Navarrete ha confirmado su postulación como candidato a la presidencia nacional el PRD, identificado con la corriente de Nueva Izquierda y de los llamados “Chuchos”, que lideran el perredismo desde hace al menos ochos años por medio de Jesús Ortega y Jesús Zambrano.
Mientras que por el Estado de México, el líder y fundador de la corriente Alternativa Democrática Nacional, el originario de Nezahualcóyotl, Héctor Bautista acompañaría la fórmula de Navarrete, como candidato a la secretaría general del PRD. El mexiquense ha sido alcalde y senador de la república por la entidad, y actualmente funge como diputado local y coordinador de la bancada perredista en la legislatura estatal.
A pesar de que Nueva Izquierda y Alternativa Democrática Nacional han tenido soterradas disputas internas, particularmente en el Estado de México, ahora han determinado forjar una alianza, bajo la premisa de conservar sus cotos de poder político al interior del partido a nivel nacional y en los comités estatales, así como en los espacios de representación popular.
En su conjunto Nueva Izquierda y Alternativa Democrática Nacional aglutinan al 65 por ciento del consejo estatal, lo que otorgaría amplias posibilidades de ganar la elección por la presidencia y secretaría general del CEN del PRD, cuyas votaciones se realizarán por separado a partir de las reformas estatutarias aprobadas ayer por el Instituto Federal Electoral.
Como alternativa de integración a Marcelo Ebrard y su grupo político, tanto Carlos Navarrete como Héctor Bautista barajan la posibilidad de ofrecer la presidencia del Consejo Nacional, situación que se observa poco viable ante la intención de Ebrard de encabezar el PRD a nivel nacional desde el Comité Ejecutivo. El riesgo inminente es la ruptura de Ebrard con el PRD.