Redacción
Lerma, Mex. 20 de julio del 2015.- La resistencia civil pacífica que emprendieron comuneros pobladores de San Francisco Xochicuautla hace casi un mes para impedir el avance de la construcción de la autopista Toluca-Naucalpan fue respaldada este lunes por familiares de normalistas desaparecidos en septiembre pasado en Iguala, Guerrero, quienes acudieron al “Campamento por la Paz y la Dignidad” que instalaron desde el 25 de junio pasado en las zona boscosa de Lerma, por donde pretende pasar el trazo de la carretera de cuota.
Los comuneros de Xochicuautla advirtieron hoy que no descansarán hasta lograr que este proyecto carretero sea cancelado definitivamente, pues si ejecución representa el inicio de un proceso de urbanización en toda esta zona boscosa donde el acuífero de Lerma se recarga.
Para los pobladores de Xochicuautla, permitir esta autopista representaría darle al traste con el aérea natural protegida denominada “Bosque de Agua” que durante siglos ha permitido el equilibrio ecológico del Valle de Toluca y el Valle de México.
La autopista que fue diseñada desde hace más de 10 años no ha podido ser terminada por la oposición de varias comunidades, entre ellas San Francisco Xochicuautla, quienes llevan más de ocho años con una lucha social y jurídica que ha impedido la conclusión de esta obra a cargo de la constructora Autovan, propiedad de Juan Armando Hinojosa, contratista predilecto de Enrique Peña Nieto.
Ante la oposición de los pobladores de Xochicuautla, el pasado 9 de julio, el gobierno federal emitió un decreto para expropiar 37 hectáreas de este núcleo comunal, para garantizar el paso de la autopista por esta zona.
Los vecinos de la localidad se han apoyado en el colectivo Causa para la elaboración de un amparo con el que pretenden echar abajo el decreto expropiatorio, que señalan está lleno de inconsistencias y metiras.
José Luis Fernández, vocero de los comuneros de Xochicuautla ha sostenido que el decreto expropiatorio es ilegal pues nunca se realizó la consulta a esta comunidad indígena, a la que estaba obligado el gobierno, para conseguir el aval a la obra.
Recalcó que aunque el decreto indica que sí se realizó, la consulta nunca tuvo efecto, pues no hubo una convocatoria para ello ni se llevo la asamblea para poner a consideración la aceptación al proyecto carretero.
Fernández dijo que las autoridades pretenden demostrar que si se llevo a cabo usando firmas de comuneros y pobladores de Xochicuautla, obtenidas mediante engaños, pues estas se obtuvieron con la justificación de que los vecinos serían beneficiarios programas sociales.
En el amparo que presentarán este viernes, reclaman el hostigamiento y persecución del cual han sido víctima durante años. En 2013, 14 pobladores fueron encarcelados acusados de impedir que se realzaran las obras de la autopista; en noviembre del 2014, otros ocho comuneros fueron detenidos tras un enfrentamiento con la policía que resguardaba las obras que realizaba Autovan.
Este lunes los pobladores de Xochicuautla recibieron con rituales otomíes a los padres de los normalistas de Ayotzinapa, quienes manifestaron su respaldo contra la imposición de esta carretera.