loader-image
Toluca, MX
5:58 am,
temperature icon
nubes
Hora Estándar Central

Salpica lodazal entre Grupo Tlalnepantla y Bravo boys

Inzunza. Acusaciones.

Redacción

Tras mantenerse en el bajo perfil durante casi tres meses después perder –por un solo voto– la elección de dirigente estatal del PAN, ayer, Jorge Inzunza Armas volvió a la escena pública no sólo  para rechazar “la imposición” en la presidencia del partido en el estado, de Oscar Sánchez Juárez, sino para ventilar actos de corrupción cometidos por éste, hace más de un año.

El ex candidato a presidir el Partido Acción Nacional en el estado de México se hizo acompañar por ex dirigentes del panismo mexiquense, pero muchos quedaron esperando la asistencia de más personalidades como Luis Felipe Bravo Mena, ex dirigente nacional y quien también ha hecho pública su inconformidad con la llegada de Sánchez Juárez a la dirigencia estatal del PAN.

Jorge Inzunza dijo que la decisión del líder nacional del PAN, Gustavo Madero de ratificar a Oscar Sánchez Juárez como dirigente estatal no es definitiva, ya que necesariamente el Comité Ejecutivo Nacional deberá emitir su dictamen respecto a la elección interna del pasado 24 de noviembre, el próximo lunes.

Al ex candidato se le calentó la boca y empezó a tirar lodo para todos lados. En principio acusó al grupo Tlalnepantla, que respalda a Sánchez Juárez, de diversos actos de corrupción. Reiteró las versiones de que Ulises Ramírez Núñez vendió candidaturas a cargos de elección popular en el pasado proceso electoral del 2012.

También insistió en que hubo compra de consejeros en la pasada elección interna del 24 de noviembre por este mismo grupo, y culminó asegurando que Sánchez Juárez desvió recursos públicos cuando ya no era coordinador de la fracción parlamentaria del PAN en el Congreso local en diciembre del 2011.

Inzunza Armas dijo que Sánchez Juárez emitió un cheque por más de 720 mil pesos de recursos de la legislatura, presuntamente para la entrega de apoyos invernales a diversas comunidades, aun cuando ya no estaba facultado para ello, pues había dejado de ser el coordinador.

Si no lo dije antes fue porque había un acuerdo interpartidista, para no afectar el proceso interno para elegir al nuevo presidente, sostuvo, pero ahora, cuando ya se asume como presidente del PAN deja ver en manos de quien está el partido.

A Inzunza casi se le olvida decir que prepara una impugnación ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, con la intención de impedir que Sánchez Juárez y el grupo Tlalnepantla mantengan el poder y control del partido en el estado.