Redacción
Toluca, Edomex; 8 de
marzo de 2025.- Más de diez mil mujeres salieron a las calles y desde varios frentes
marcharon en diversos puntos de la ciudad de Toluca, para terminar con un enorme
contingente que se movilizó en el centro histórico de la capital mexiquense,
para conmemorar un año más, el Día Internacional de la Mujer, y expresar que prevalece
la violencia de género, la violencia feminicida y la falta de paridad para las féminas
en todos los ámbitos de la vida personal, pública y familiar.
Previamente, organizaciones
feministas, convocaron a esta marcha conmemorativa en defensa de los derechos y
libertades de las mujeres, a la cual asistieron abuelas, madres, hijas,
profesionistas, universitarias, víctimas y familiares de las víctimas, quienes
portaron pancartas, cartulinas y banderas para exigir al estado mexicano
atención a la violencia sexual, física, psicológica, económica y patrimonial
que lacera la cotidianidad de las mujeres, sin distingo de su condición social
o actividad profesional.
“Estas morras sí me
representan” “El que no brinque es macho”, eran parte de los gritos que
contagiaban a los diversos contingentes, para saber que no están solas, y que
entre ellas han conformado un escudo de protección más robusto de lo que ha
podido hacer el Estado Mexicano.
Por su parte, las
autoridades estatales y municipales, habían establecido un dispositivo para la
protección de edificios, monumentos e inmuebles históricos, a través de la
presencia robusta de agentes policíacos -mayoritariamente mujeres-, así como
estructuras metálicas y vallas que blindaban el Palacio de Gobierno, la Cámara
de Diputados, el Poder Judicial, el Palacio Municipal y la Catedral del Toluca.
Vestidas de morado,
blanco y verde, las mujeres de todas las edades, gritaron consignas para hacer
escuchar en una sola voz que son víctimas de todo tipo de violencia, al tiempo
de denunciar las carencias de un sistema de gobierno o políticas públicas que
han sido insuficientes o incapaces de otorgarles protección, o bien, una vez
que han sido víctimas de violencia, un sistema de justicia en el que prevalece
la impunidad de los agresores y victimarios de la violencia de género.
En una expresión que se ha
vuelto necesaria para visibilizar sus exigencias y demandas históricas,
realizaron pintas en los pilares de los portales de la ciudad de Toluca, en
donde aprovecharon los muros como páginas de papel -en donde también pegaron
sus rostros y nombres-, para denunciar a presuntos deudores alimentarios,
violadores y feminicidas, que son imputados por diversos delitos, pero sin castigos
por parte de las autoridades judiciales.
Al llegar al Palacio de
Gobierno, el ala negra de la protesta derribó las vallas metálicas que resguardaba
el edificio donde despacha la gobernadora Delfina Gómez; quienes fueron
repelidas por elementos policíacos. Hubo connatos de enfrentamiento, que los
agentes de seguridad pública pretendieron contener con el uso de gas lacrimógeno.
Las mujeres lograron hacer algunas pintas como parte de su protesta en muros
del inmueble localizado en Lerdo 300.
La mayoría del
contingente se concentró alrededor de la asta bandera de la Plaza de los Mártires,
que se encontraba desborado por la presencia de los diversos contingentes sobre
calles como Lerdo, Independencia, Bravo y Riva Palacio.
Ahí, entre consignas y
arengas, recordaron que esta fecha no es para celebrar, y sí para conmemorar y
exigir un alto a las condiciones de violencia de género que sufren en todos los
espacios de su vida cotidiana, ya sea sus hogares, sus escuelas, sus oficinas,
las calles, el transporte público, en donde no dejan de sentirse inseguras,
violentadas y agredidas.
Un contingente más, se apostó
al exterior de la sede central de la Fiscalía General de Justicia del Estado de
México, donde exigieron un cese a la impunidad de presuntos violadores,
asesinos y agresores que forman parte de sus carpetas de investigación, o procesos
judiciales, y permanecen sin sentencias ni castigos.