Redacción
Otra vez la inconformidad social agredió patrullas de la policía. En esta ocasión, habitantes de Chimalhuacán apedrearon una decena de patrullas y una ambulancia de rescate, luego de que un hombre se suicidó el pasado sábado y considerar que su actuación fue lenta e impidió el rescate de la víctima.
Tan sólo en este año, otras movilizaciones sociales han afectado patrullas policíacas en los municipios de Chalco, Huehuetoca, Tultepec y Coyotepec, las cuales han sido destruidas e incendiadas, derivado de diversas inconformidades sociales con los cuerpos de seguridad pública.
Ahora, en Chimalhuacán, los pobladores reclamaron a los agentes policíacos su impericia para salvar la vida de un hombre que trepó a lo más alto de una torre de alta tensión y después de cuatro horas cayó al vacío cuando intentaban sujetarlo con cuerdas.
Los hechos ocurrieron el sábado anterior, cuando se reportó que un sujeto trepó a la séptima torre más de 30 metros, para posteriormente recorrer toda la estructura hasta el punto final donde se sostiene el cableado.
En un intento por evitar que el sujeto cumpliera su amenaza de suicidarse, tres rescatistas subieron a la estructura metálica y dos iniciaron maniobras para hacerlo descender de la torre. Lo sujetaron con una cuerda, la cual quedó colgada de la estructura, sin embargo, no soportó el peso del hombre y se soltó, golpeó con otra estructura que sostiene el cableado hasta caer al pavimento.
Reportes de la Secretaría de Seguridad Ciudadana indicaron que los comerciantes del tianguis que se instala los sábados sobre el camellón de la avenida Las Torres, incitaron a la población para que agredieran a los elementos de las policías municipal y estatal.
Los policías cubrieron el cuerpo con sábanas y se lo llevaron con el argumento de que aún estaba con vida, pero cuando llegaron al hospital general 90 Camas ya había fallecido.
De inmediato, la población enardecida arrojó piedras contra las unidades policiacas.
La policía hizo disparos al aire para dispersar a las más de 80 personas que atacaron las patrullas. Las unidades con mayor daño fueron la 334, 335 y 338 de seguridad pública municipal, así como la ambulancia RM-1 de rescate municipal, que iba a la retaguardia.