Toluca, Edomex. 06 de enero de 2017.- En política la forma es fondo. Ayer en la primera reunión del gabinete federal, Luis Videgaray retomó su lugar a la izquierda del presidente Enrique Peña. Ahora la cancillería tendrá una amplia influencia en la toma de decisiones. En el flanco derecho de Peña Nieto apareció Miguel Ángel Osorio. La disputa por la candidatura presidencial se ha reestablecido. Eruviel pierde, porque sus lealtades políticas están con el flamante canciller que desconoce de diplomacia pero está dispuesto a aprender.
Con los ajustes más recientes, los mexiquenses que sobreviven en el gabinete presidencial como titulares de alguna secretaría son Luis Videgaray en Relaciones Exteriores; Luis Miranda en Desarrollo Social; Gerardo Ruiz Esparza en Comunicaciones y Transportes; y Alfonso Navarrete Prida en Trabajo y Previsión Social. Sólo los últimos dos en sus posiciones originales. La lista todavía es larga en subsecretarías, organismos descentralizados y desconcentrados, coordinaciones generales y unidades administrativas.
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En medio del descontento social, Andrés Manuel López Obrador alista su gira por el Estado de México. Entre sábado y domingo visitará seis municipios mexiquenses. El dos veces candidato presidencial fustigará el alza a los combustibles para arremeter en contra de la clase gobernante. El Grupo Atlacomulco será el blanco de sus ataques en un escenario inmejorable para su causa: el hartazgo ciudadano, una serie de reformas que incumplieron sus promesas y expectativas, y la elección de gobernador a resolverse en junio próximo.
Desde ahora se puede anticipar que la campaña del Movimiento de Regeneración Nacional no la encabezará la inminente candidatura de Delfina Gómez -exalcaldesa de Texcoco-. El proselitismo del morenaje en el Estado de México será liderado por López Obrador, en una anticipada campaña presidencial que realizará en la elección de 2018. Andrés Manuel buscará fortalecer su capital político en un intento por descarrilar al priísmo en la tierra natal de Peña Nieto.
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Una decena de aspirantes priístas dejaron su carta a los Reyes Magos para pedir una misma cosa: la candidatura a la gubernatura mexiquense. Sólo uno podrá ser ungido, en una determinación unipersonal desde Los Pinos. Si las decisiones son como el alza de los combustibles, sin mediar los costos políticos, quizá no haya marcha atrás para formalizar una decisión que ya estaba tomada hace seis años. Si la ponderación oscila entre pros y contras, todavía hay una baraja de hasta cinco posibles aspirantes soñando con suceder a Eruviel Ávila.
A poco más de quince días de conocer al candidato priísta resulta extraño que la dirigencia nacional no haya convocado a firmar un pacto de unidad entre los aspirantes. La formalización de dicho acto, reduce la baraja de aspirantes, y daría pistas mayúsculas sobre quién podría ser el candidato a gobernador. Hasta ahora todas son especulaciones, ante la falta de señales del ungimiento.
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