Cero y van dos. El senador Manlio Fabio Beltrones se apuntó otra palomita en la carrera presidencial de 2012. El pasado fin de semana arrancó reflectores en el Consejo Político Nacional del PRI ante la ausencia –dicen que forzada- de Enrique Peña Nieto. Ayer encabezó la reunión con Javier Sicilia donde dio cátedra de su liderazgo político, de su ánimo conciliador y de las estrategias que aguarda para arrebatar la candidatura priísta al todavía gobernador mexiquense, y candidato puntero en todas las encuestas.
El más vapuleado sin estar presente fue el gobernador Enrique Peña Nieto. Un reclamo constante del movimiento por la Paz fue el freno a la reforma política en la Cámara de Diputados, en específico la fracción priísta, que en su mayoría se repliega a los intereses peñistas. Ante la presión, el legislador Francisco Rojas –originario de Tenango del Valle- dijo que sí se avalará la reforma política pero sin reelección, un punto en el que el priísmo por origen y antonomasia manifestará su oposición.
En los escenarios presidenciales también estuvo Josefina Vázquez Mota. La panista también mostró su músculo al interior de su Grupo Parlamentario, pese a que en ese grupo parlamentario ya hay divisiones marcadas que apoyan a Ernesto Cordero o Santiago Creel. Vázquez Mota tomó el control de la interlocución panista a su favor, y en el fondo, aunque no se quiera, los presentes con futuro político sacaron una raja electoral inconmensurable tras la reunión con Sicilia. De eso no hay duda para nadie.
A propósito de los presidenciales panistas, el Estado de México juega un papel fundamental. Si se voltea a ver a la propia Vázquez Mota no se descuide la presencia del legislador Carlos Alberto Pérez Cuevas –de Nezahualcóyotl- quien tiene una amplia injerencia en las decisiones políticas de la ex secretaria de Educación. En el equipo de Ernesto Cordero, el naucalpense Moisés Alcalde Virgen es su representante en el proceso de selección interno panista. Y de Santiago Creel, tiene un sólido respaldo en José Luis Durán Reveles, quien fue coordinador de la campaña presidencial de Diego Fernández de Ceballos, y está esperanzado en ir por la segunda oportunidad.
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El próximo domingo, Luisa María Calderón Hinojosa será electa como candidata a gobernadora del PAN en Michoacán. La gran incógnita es si a esta bandera política se suma Elba Esther Gordillo y su PANAL, pese a los agravios y desencuentros que en los últimos meses ha venido acumulando con el gobierno calderonista. Apoyar a la famosa “cocoa” es la única oportunidad de triunfo, pero también es cierto que la relación Gordillo – Calderón no pasa por su mejor momento en la historia del sexenio.
En la operación política, las elecciones de Michoacán a celebrarse en noviembre parecen favorecer por tercera ocasión al PRD. El primer gobierno perredista fue el de Lázaro Cárdenas Batel. Actualmente, la segunda gestión corresponde a Leonel Godoy –medio hermano de Julio César Godoy, ex diputado federal y prófugo de la justicia-. Y si todo sale como la familia Cárdenas espera, el candidato del partido del sol azteca y próximo mandatario será el actual senador Silvano Aureoles.
