Ernesto Nemer Álvarez podría estar fuera del gabinete estatal. El ex coordinador de los diputados locales prepara maletas para San Lázaro. La única disyuntiva que presenta es si se somete al escrutinio electoral y busca la diputación por mayoría en Metepec; o bien si se inscribe a la diputación plurinominal por la quinta circunscripción. La última decisión la tiene Enrique Peña Nieto, quien ajusta las candidaturas para cicatrizar las heridas que vayan dejando en el camino la repartición de puestos en el Congreso de la Unión. La operación política hace falta y es muy necesaria.
Ante la posible salida de Nemer de la secretaría general de gobierno, ya se alistan en la sala de espera al menos dos activos del eruvielismo. Por un lado, José Manzur Quiroga, actual coordinador de los diputados locales y vinculado a Isidro Pastor, quien se promueve ampliamente para la secretaría General de Gobierno, y desde ahí favorecer a sus pupilos políticos que ya buscan saltar en el escenario electoral; ellos son David Sánchez Isidoro, Gerardo Hernández Tapia, Adrián Fuentes Villalobos y Agustín González Cabrera, todos ellos alcaldes en el periodo 2006 – 2009.
En la acera de enfrente salta el nombre de Isidro Muñoz Rivera, actual secretario técnico del gabinete. Muñoz Rivera también tiene sus intereses electorales, asentados en específico en el Valle de Toluca, de la mano de Martha Hilda González Calderón, cuyo corazón late por la capital mexiquense y convertirse en presidenta municipal; además de Miguel Ángel Terrón Mendoza que insiste en colarse por la presidencia municipal de Metepec, que ya tiene varios tiradores en puerta entre Laura Barrera, Carolina Monroy y lo que se acumule en la semana. Así son las cosas de elecciones.
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Tras reconocer, de nueva cuenta y ahora en entrevista periodística, que sí tiene un hijo fuera del matrimonio del cual se hace cargo. Hay fuentes bien enteradas que dicen que lo privado podría ventilarse al asunto de lo público. Y todo porque la madre del menor, insiste a través de las redes sociales, que el progenitor no se hace cargo de la manutención desde hace más de dos años. Los conflictos maritales parecen ser la rutina de la víspera electoral. Primero fue el tío y luego el sobrino. ¿Quién se apunta en la fila?
Pero la culpa no la tuvo el indio sino quien lo hizo compadre. Estas cosas se respetarían en el asunto de lo privado, si no fueran los propios políticos que en la búsqueda del burladero a la ley electoral, optaron por la promoción personal a partir de hacer públicos los asuntos de pareja, las fiestas familiares, los cumpleaños, los viajes vacacionales y demás circunstancias de la vida personal. Como lo dijo alguna vez el mismo que reconoció sus affaires sentimentales, «a quien no le guste el fuego, que no se meta a la cocina».
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Hoy en día, todos dicen tener méritos, trayectoria y preparación para disputar los cargos de elección popular que están por venir. Si la premisa fuera cierta, no habría tanta improvisación en los cabildos, tanta pasividad en los congresos, y este país sería otra cosa.
