Redacción
Conforme a lo planeado y sin contratiempos hasta el momento, el proyecto del Tren Interurbano México-Toluca se encarrila para su desarrollo en los próximos tres años. Este fin de semana, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, reiteró que será en junio cuando iniciará la construcción de la primera etapa de la obra.
Además, en un comunicado, reveló que fue aprobada la convocatoria para el proceso de licitación del segundo tramo, donde se comprende la construcción de un túnel, que iniciará en la zona de La Marquesa y concluirá en Santa Fe, en la delegación Cuajimalpa del Distrito Federal.
La dependencia que encabeza Gerardo Ruiz Esparza informó que todos los pasos y procedimientos se están cumpliendo conforme al calendario establecido, por lo que espera que en el último trimestre del 2017, el tren ya esté operando para movilizar a más de 270 mil personas por día.
El pasado 28 de febrero, la SCT lanzó oficialmente la convocatoria del proceso de licitación del primer tramo del Tren que comprende 36 de los 58 kilómetros que tendrá el recorrido. Este tramo correrá de Zinacantepec, justo en vialidad las Torres, a la altura de la Escuela Superior de Educación Física, hasta Ocoyoacac, muy cerca del parque nacional de La Marquesa.
En este tramo se construirá el viaducto elevado por el que correrá el tren a una altura de 9 metros de la superficie y las estaciones de Zinacantepec, Toluca (terminal) Metepec (Aeropuerto) Lerma (autopista México- Toluca).
Para la segunda etapa, se contempla la construcción del túnel de 4 kilómetros y medio por donde correrá el tren para conectar de La Marquesa a Santa Fe. Además se contempla la edificación de la estación San Fe, y del viaducto ferroviario por donde correrá el tren sobre la avenida Vasco de Quiroga hasta llegar a la terminal Observatorio.
En mayo, se lanzará propiamente la convocatoria para la edificación de esta segunda etapa, mientras que el 10 de junio se hará el anuncio oficial de la adjudicación al consorcio que presente las mejores propuestas técnicas y económicas para realizar el primer tramo.
En la obra están interesados empresarios mexiquenses como Roberto Alcántara, del Grupo Toluca, dueños de los autobuses Flecha Roja y Caminante y de la aerolínea Viva Aerobus; el Grupo Hermes, en su filial constructora, propiedad de Carlos Hank Rhon; Carso Constructora, de Carlos Slim y otras empresas trasnacionales dedicadas a la fabricación del material rodante como CAF, Alstom y Simmens.