Redacción
Toluca, Edomex. 14 de junio del 2016.- El secretario General de Gobierno del estado de México, José Manzur Quiroga, afirmó que los tres reos que se fugaron la noche del lunes del penal de Barrientos, en Tlalnepantla, lo hicieron saltándose una barda de más de 5 metros de este centro de readaptación social y aprovechando el desconcierto que causó el motín en el que participaron más de 500 internos.
Los prisioneros lograron subir por un tubo hasta la parte alta de la barda y cubrieron el alambrado de púas con ropa del penal para no lastimarse. Así se dieron a la fuga sin ser vistos ni por custodios ni por los más de mil efectivos de seguridad que fueron desplegados al lugar para contener el motín en esta cárcel, considerada una de las más problemáticas de todo el estado.
En marzo pasado, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) presentó su Diagnostico de Supervisión Penitenciaria 2015, donde el penal de Barrientos salió reprobado junto con otras cinco cárceles más del estado de México, no sólo por la sobrepoblación que ahí existe, sino por la falta de personal de custodia y las condiciones indignas en las que viven los reos.
A decir de la CNDH, el penal de Barrientos tiene una capacidad instalada para albergar dignamente a mil 260 internos, pero en la actualidad existen más de tres mil , es decir, que tiene una sobrepoblación mayor al cien por ciento., como también lo reconocieron las autoridades.
Además, también se reconoció que en esta cárcel existe un déficit del personal de custodia 85 elementos.
Quejas de familiares por corrupción al interior de esta cárcel
Este martes, el penal de Barrientos se abrió para que los familiares de los internos pudieran visitarlos y constatar su estado de salud, tras la reyerta del lunes por la noche.
Los familiares aprovecharon la presencia medios de comunicación para denunciar las arbitrariedades e irregularidades que se registran en este lugar.
Aseguraron que que dentro del penal todo tiene precio. Los custodios cobran por dejar meter comida, cigarros o refrescos.
También se cobra por la seguridad. “Quien tiene dinero duerme en una celda con planchas y colchonetas, y quien no, lo mandan a celdas donde duermen 10 o 15 internos”.
Se quejaron de las revisiones «inmorales» que realizan los custodios para ingresar a la visita, pero en cambio toleran el acceso de artículos prohibidos cuando existe mucho dinero de por medio.
«Aquí puedes obtener lo que sea a través del dinero. Si tienes lana estás seguro, si no la tienes te debes de andar con cuidado. Si se te antoja algo, los custodios te lo traen siempre y cuando les des su entre. También entre la población penitenciaria se pueden obtener cosas, alimentos, bebidas y hasta droga. Si esto pasa al interior del penal es porque hay corrupción», dijo uno de los familiares de los internos