Redacción
Ciudad de México. 25 de octubre de 2018.- El secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza reiteró que resulta “imposible y no es viable” la operación simultánea de los aeropuertos de la Ciudad de México y Santa Lucía. En su comparecencia ante la Cámara de Diputados Federal, el funcionario federal afirmó que una eventual cancelación del proyecto aeroportuario en Texcoco, afectaría económicamente a 307 empresas, 90 por ciento de ellas, mexicanas.
El mismo día que ha iniciado la consulta ciudadana convocada por el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador para definir el futuro del nuevo aeropuerto, Ruiz Esparza insistió en que la construcción del aeropuerto en Texcoco “avanza”, y en cuya infraestructura se han invertido 100 mil millones de pesos, se han contratado 175 mil millones, y existen recursos para cubrir las necesidades financieras en lo que resta del 2018, en 2019 y el primer semestre de 2020.
La eventual cancelación de la obra en Texcoco, sería de 60 mil millones de pesos, y 40 mil millones más por costo de insumos.
En su intervención, el funcionario federal fue interpelado por diputados de Morena y del Partido del Trabajo, derivado de la defensa planteada al Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) en Texcoco.
No obstante, Ruiz Esparza justificó el proyecto aeroportuario bajo los argumentos de la OCDE, organización multinacional que respalda la obra a través de José Ángel Gurría.
“El NAICM tendrá capacidad para atender en su primera etapa hasta 70 millones de pasajeros y en su capacidad máxima serán 125 millones. Se calcula que en toda la etapa de construcción se generarán un total de 160 mil empleos y en su máxima etapa de operación 450 mil”, añadió.
Argumentó además que la obra se realiza bajo el esquema de Contrataciones Abiertas, modelo promovido por el Banco Mundial para transparentar la información en todas las etapas del proyecto y con observadores permanentes de la OCDE y la Secretaría de la Función Pública (SFP).
“El NAIM se realiza bajo el esquema de contrataciones abiertas, modelo promovido por el Banco Mundial para transparentar la información en todas las etapas del proyecto y con observadores permanentes de la OCDE y la SFP”, comentó.