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Ecléctica

Piensa en grande, hazte chiquito

Israel Dávila

La próxima semana se cumplirán los primeros cien días de gobierno de Eruviel Ávila Villegas, el candidato que llamó a “pensar en grande” y que prometió, gobernar de la misma forma, sin embargo, a la fecha el nuevo mandatario no ha hecho nada que  haga honor a su eslogan publicitario.

Contrario a lo que se pensaba cuando anunció que recorrería los 125 municipios del estado en los primeros cien días de gobierno y,  que en este periodo cumpliría sus primeros compromisos, de los seis mil que firmó en campaña, Eruviel Ávila ha iniciado titubeante, y ha preferido mantener el bajo perfil en los medios de comunicación.

La figura de su antecesor Enrique Peña Nieto sigue eclipsando su desempeño como gobernador; las comparaciones son recurrentes y poco favorables para el nuevo mandatario quien no desaprovecha ningún acto para elogiar a quien le dio la oportunidad de llegar al cargo.

A Eruviel parece no gustarle mucho convivir con los medios de comunicación.  El contacto con los reporteros que cubren sus actividades cotidianamente es muy limitado. Prefiere mantener distancia de ellos, a través de vallas metálicas y corrales. Evita conceder entrevistas para fijar posición sobre los temas de actualidad.

Sus actos son planos. Informativamente son poco atractivos. No hace anuncios de obras de alto impacto ni mucho menos  pronunciamientos que merezcan la portada en los medios.  Se dedica a agradecer el apoyo brindado en campaña, a reiterar que no fallará como gobernador y a repartir paliativos a los asistentes, ya sea con un par de lentes o con zapatos ortopédicos para los menores que lo requieran.

Sus principales promesas de campaña que fueron la bandera de su proselitismo no se han hecho realidad. La tarjeta la Efectiva, que tienen casi dos millones de personas que asistieron a sus mítines cuando era candidato aun no tiene fecha exacta para que inicie a operar y los beneficiarios a recibir los apoyos prometidos.

El compromiso de eliminar la tenencia vehicular a partir del próximo año –el primero firmado ante notario, durante la madrugada del pasado 16 de mayo—quedó trunco. Los diputados locales no apoyaron la idea de desaparecer por completo esta tributación, y ahora este impuesto lo tendrán que pagar los propietarios de los vehículos de lujo y todos aquellos que tengan rezagos en el pago de mismo.

A pesar de tener un Congreso a modo, dominado por una amplia mayoría priísta, Eruviel no pudo convencer a los legisladores de establecer la cadena perpetua a pederastas, tratantes de personas y secuestradores como lo también lo prometió  en campaña.  La mano dura, quedó a medias, luego de que los diputados solo le avalaran fijar la prisión vitalicia a feminicidas, homicidas seriales y violadores.

La creación de Secretaría de Seguridad Ciudadana en lugar de la Agencia de Seguridad Estatal no ha dejado de ser sólo un cambio de nombre en la dependencia. Las cosas siguen igual y la policía opera de la misma forma. Eso sí, algunos con nuevos uniformes, pero nada más.

Por cierto, la policía estatal sigue bajo el mando del comandante Rogelio Cortés quien fue videograbado avalando las prácticas de corrupción de sus elementos, hecho que reprobó Eruviel como candidato, y que ahora parece haberse olvidado de su promesa de encabezar un gobierno honesto, como lo aseguró el primer día de su mandato.

En suma después de casi cien días seguimos esperando acciones en grande, pero sobre todo que el gobernador se asuma como tal y deje de hacerse chiquito como hasta ahora lo ha demostrado.

 

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