Redacción
La primera vuelta de la elección interna para elegir a los candidatos a diputados plurinominales en Acción Nacional el pasado domingo 15 de enero marcó una tendencia clara. Casi el 60 por ciento de los aspirantes que resultaron vencedores en sus distritos, responden a la estructura que apoya la aspiración de Ernesto Cordero a la Presidencia de la República.
A decir de los panistas, este elemento es el mejor termómetro para ver con certeza cómo van las tendencias dentro del PAN para la candidatura presidencial y no tanto así los sondeos que han levantado casi todas las casas encuestadoras, donde le dan hasta 50 por ciento de ventaja a Josefina Vázquez Mota en las preferencias electorales.
En el estado de México, son pocos los que se atreven a dar un pronóstico de lo que sucederá el domingo. Aquí existe un universo de 22 mil militantes activos y poco más de 60 mil adherentes, que podrán emitir su sufragio en los centros de votación que se instalarán en cada distrito electoral.
En el estado de México los apoyos para los precandidatos presidenciales panistas están muy claros. El grupo del senador Ulises Ramírez trabaja para el ex secretario de Hacienda Ernesto Cordero. Los llamados Bravo Boys, lo hacen para la diputada con licencia, Josefina Vázquez Mota, y los hermanos Durán y pequeños grupos del sur del estado, impulsan las aspiraciones de Santiago Creel.
Si hacemos proyecciones tomando como base lo que aconteció el pasado 15 de enero en la elección de los candidatos a diputados plurinominales, se podría establecer que Ernesto Cordero ganará el estado de México de manera holgada. Aunque con los panistas, nada se puede predecir.
En esa primera vuelta de la elección para los candidatos plurinominales, el grupo de senador Ulises Ramírez ganó en 28 de los 40 distritos en disputa y los Bravo Boys lograron magros resultados, al grado que ni la líder Adriana González Carrillo, pudo ganar el distrito por el que compitió. Los allegados a Santiago Creel simplemente no figuraron.
En efecto, al interior del PAN, todo mundo sabe que los únicos con capacidad y experiencia para movilizar a la estructura tanto de activos como de adherentes, son los operadores de Ulises Ramírez. La fuerza del senador se ubica en el Valle de México, donde se concentra el 70 por ciento del padrón panista que podrá votar el próximo domingo.
Entre los operadores que tiene Ulises Ramírez trabajando para la candidatura de Cordero se encuentran la diputada Gabriela Gamboa en Metepec; el legislador, Oscar Sánchez en Huixquilucan; Víctor Hugo Sondón en Tlalnepantla y el dirigente estatal, Octavio Germán Olivares, en Tecámac. También cuenta con otros personajes de no mucho renombre, pero muy efectivos en Nezahualcóyotl, Ecatepec, y Atizapán.
En Toluca, quien le trabaja a Cordero, es nada menos que el ex presidente municipal Juan Carlos Núñez Armas, con un grupo de operadores encabezados por Mauricio Aguirre.
De su lado, el apoyo de Josefina Vázquez Mota se concentra en la zona poniente del valle de México y parte de la capital del estado, aunque su tirada es convencer a los adherentes para que salgan a votar el 5 de febrero.
La fuerza operativa de Vázquez Mota se concentra en Naucalpan, Atizapán y Toluca y los municipios del oriente del estado. En los dos primeros municipios tiene operando a Edgar Olvera, delegado de la secretaría de Desarrollo Social, a Gustavo Parra Noriega, candidato al Senado y actual diputado local y a Mariela Pérez de Tejada, diputada federal.
En Toluca le respaldan la diputada Mónica Fragoso, la ex diputada María Elena Chávez y el grupo del ex presidente municipal, Juan Rodolfo Sánchez Gómez. También aspira a rescatar votos en Nezahualcóyotl, Ixtapaluca, Chalco y Valle de Chalco, con la operación de su incondicional, Carlos Alberto Pérez Cuevas.
Al que no le dan muchas esperanzas de triunfo en la entidad es a Santiago Creel, quien tiene como coordinador al ex presidente municipal de Naucalpan, José Luis Durán Reveles y al ex dirigente del PAN en la entidad, Francisco Gárate Chapa. No obstante, su apuesta es que también los adherentes puedan sumarse a su causa, y que la inercia de apoyo que tiene en el Distrito Federal, pueda cruzar fronteras para llegar al Estado de México.
Para el domingo se espera una participación cercana al 45 por ciento del padrón de militantes activos y del 30 por ciento de adherentes. A la hora que conozcamos al triunfador del Super Bowl seguramente también conoceremos cual fue la lógica que impero en la elección; la que marcaron las encuestas, o la impredecible que acostumbran los de Acción Nacional.