Toluca, Edomex. 22 de mayo de 2019.- Ecatepec, el municipio más poblado del país, transita por una estigmatización lastimosa. Ayer, autoridades locales inauguraron unas letras con el nombre del municipio, que adornan la imagen urbana de la cabecera municipal. A través de redes sociales, se burlaron de una localidad azotada por la delincuencia común, la explosión demográfica, el desorden social y la fragilidad de sus instituciones. El mundo digital jugó burlonamente sobre los lastres de un municipio, que no podría revertir su condición, para aspirar a ser Pueblo Mágico.
En los últimos años, Ecatepec ha alcanzado una fama pública indeseable, apegada a una alta incidencia criminal, una localidad dormitorio que acentúa los problemas sociales, la carencia profusa de servicios básicos y un desdén para las autoridades federales y estatales. Ecatepec, es parte del Estado de México, tan sustancial como sus sitios turísticos, la capital del estado o Atlacomulco. Sin embargo, durante años ha estado en el olvido, salvo en tiempos electorales.
El colmo: la clase gobernante de Ecatepec que alcanzó la cúspide el sexenio pasado, actualmente padece una defenestración de la vida pública.
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La renuncia de Germán Martínez Cázares como director general del IMSS tendrá múltiples repercusiones políticas, pero hay una que no debe perderse de vista.
La institución de salud pública más importante del país, ha estado sujeta durante años a las designaciones políticas por encima del conocimiento técnico. Un ejemplo, se puede observar en el Estado de México. Durante el calderonismo, fue nombrado Xavier Maawad como delegado del IMSS poniente. Un empresario de ultraderecha, que encontró refugio luego de su derrota electoral en Metepec; y famoso por liarse a golpes con perredistas en la tribuna de San Lázaro.
En el peñismo, sí llegó un médico pero con perfil político. Enrique Gómez Bravo Topete ha tenido larga trayectoria en el servicio público. Su mayor mérito: ser un hombre apegado al partido en el poder. Su mayor ascenso fue alcanzado durante el montielismo, como secretario de Salud de la entidad.
Y ahora, a principios de año fue designado Adán Gordo Ramírez, exalcalde interino de Texcoco. Un hombre cercano a Higinio Martínez. Sin experiencia en asuntos médicos, pero que responde a componendas políticas inaceptables.
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Todas las medidas ambientales son bienvenidas frente a la emergencia ambiental que atraviesa el Valle de Toluca. Lo fundamental se concentra en que sean acciones y decisiones de largo plazo: irrenunciables e inaplazables. Que no sólo sean tareas de corto plazo e impacto mediático. Que se conviertan en políticas públicas de largo plazo e impacto ambiental. Que trasciendan coyunturas y no exclusivamente la coyuntura actual.
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