loader-image
Toluca, MX
3:29 pm,
temperature icon
humo
Hora Estándar Central

OFF THE RÉCORD

El rector de la UAEM, Eduardo Gasca Pliego ha entrado a la recta final de su administración. Anunció ya un plan de acción que trazarán sus últimos 100 días al frente de la institución universitaria. Y con su despedida, dio el banderazo no oficial para la pasarela de quienes suspiran con sucederlo. Ahí se enumera el caso de Felipe González Solano, el secretario de Docencia,  uno de los hombres más cercanos al propio Gasca. Quienes siguen de cerca de las actividades, saben que Felipe se ha placeado en los últimos meses.

Otro en esa lista, es Jorge Olvera, secretario técnico del gabinete universitario y ex abogado general de la institución. Olvera –hermano de Julio César, el ex consejero electoral- tiene también la mira puesta en la sucesión que ocurrirá el próximo 14 de mayo. No obstante, Gasca fue muy claro con todos para que den se máximo esfuerzo en los meses por venir, y que las definiciones sucesorias se tomen con mucha mesura, y en los tiempos que marca el reglamento institucional.

Los suspirantes se completan con Yolanda Ballesteros Sentíes. La hija de la ex alcaldesa de Toluca Yolanda Sentíes, se desempeña como secretaria de Extensión y Vinculación y también aspira. Buscar convertirse en la primera mujer en alcanzar el rectorado de la UAEM. Y hay quienes sugieren no descartar de esa circunstancia a Jaime Jaramillo, el secretario de Administración, y también puntal en la gestión de Gasca durante los últimos cuatro años en la Máxima Casa de Estudios de la entidad.

El cotilleo en columnas políticas también ha dejado sentir el fuego amigo. Y es que en una decisión como designar al próximo rector juegan todos. Los aspirantes, sus amigos y sus adversarios. Los funcionarios actuales y los ex rectores. La Universidad del Estado de México representa desde hace mucho un nicho de poder, que muchos querrán conservar, y otros ganar o recuperar. En juego está el destino de la educación media superior y superior de la entidad para los próximos cuatro años.

—————–

La impunidad prevaleciente en el Estado de México ayer cobró la vida de dos presuntos asaltantes en el municipio de Ecatepec. La turba de pobladores, está ávida de cobrar justicia por su propia mano, y de esa forma asesinó a dos delincuentes que minutos antes habían atracado un consultorio dental, según reportaron las autoridades estatales. No es el primer acto en que los habitantes deciden actuar de forma más enérgica que las corporaciones policíacas. No hay confianza en la justicia del país.

Mientras impera la ley del talión, de ojo por ojo y diente por diente, tanto delincuente es como el que asalta, como quien hace justicia por propia mano. La procuraduría de justicia estatal debería estar preocupada y ocupada de los asesinatos ocurridos en Ecatepec, porque por muy delincuentes que fuesen, los muertos también reclaman justicia, en medio del linchamiento social, cada vez más presente, cada vez más común.